Con detección de casos de coronavirus inicia tensión en República Dominicana.

Por Marcelo Peralta

Santiago, R.D.- Ante la presunta sospecha de la aparición de dos personas con síntomas del coronavirus, reacciones adversas, diversas, conjeturas por el terrible mal sanitario, que en China, su expansión al mundo causando muertes, miles de infectados, pérdidas multimillonarias en transacciones comerciales y el aislamiento de continentes.

Mientras que en la República Dominicana que sus mayores entrada en divisas es el turismo, las autoridades del ministerio de Salud Pública afirma tener a un ciudadano de origen italiano contagiado con el bacilo de la “pandemia” y analiza a otro de descendencia francesa ponen en “vilo” la credibilidad del gobierno, inseguridad del país y causando tensión colectiva.

Desde pueblos citadinos, provincias y regiones, hombres, mujeres de oficios diferentes demandan del gobierno adoptar las medidas precautorias sanitarias, migratorias, especial en los aeropuertos, puertos, entradas terrestres con el propósito de evitar la propagación de la pandemia, a sabiendo lo vulnerable que significa el sistema de salud y el descontrol fronterizo.

Sugieren al presidente dominicano Danilo Medina emitir un decreto en el que prohíba la entrada de alimentos, ropas, zapatos  usados, tráfico de personas por la frontera con Haití, para de esa forma contrarrestar brotes epidémicos que afecte a las personas que viven en República Dominicana.

Al ministro del sistema de Salud Pública del Estado confirmar la existencia de un italiano con los síntomas del coronavirus y la sospecha de otro de nacionalidad francesa sospechoso que es analizado, inicia la incertidumbre y presagios entre los dominicanos.

Algunos se aprovisionan de mascarillas para neutralizar las salivas por estornudos, desistir a lugares de aglomeración, abordar unidades del concho, evitar los tumultos de guaguas, tiendas, restaurantes, centros de salud, mercados de purgas donde proliferan millares de haitianos antihigiénicos.