Entre lágrimas, periplo, lluvias sepultaron en Santiago Rodríguez a César Saint Hilaire
Abogados de Santiago Rodríguez hacen giardia de honor al cadáver del doctor Cásar Octavio Saint Hilaire Cabrera.
Hubo reflexiones sobre su impronta, profesional, dimensión social, cultural y poética.
Por: Marcelo Peralta fotos Iris Tejada.
SABANETA, Santiago Rodríguez,
R.D.-Tras un fuerte aguacero, entre lágrimas, recorrido, visita al Palacio de
Justicia, sus oficinas, reflexiones de su impronta, desempeño profesional, dimensión
social, cultural, escritos literarios, poéticos, laboral, aquí, fueron sepultados
los restos del abogado a César Saint Hilaire Cabrera.
Falleció a la edad de 85
años, aquejado de dolencias corporales que lo mantuvieron hospitalizados en la
Clínica Corominas en Santiago y en otro centro en Sabaneta.
Saint Hilaire Cabrera, hijo
de hombre nativo de la provincia Santiago
Rodríguez y de madre oriunda del municipio San Lorenzo de Guayubín, en
Montecristi.
Desde joven se radicó en el
municipio de Sabaneta donde formó su familia de tres hijos César Octavio,
Gustavo y Cesarina Saint Hilaire con doña Carmen Socorro Villalona Hernández-Cucha-
a quienes profesionalizaron en universidades de alto nivel en Santiago de los Caballeros.
El carro fúnebre cuando hace una parada frente al Palacio de Justicia en la calle Pedro Thómas esquina Fernando Deligne.
Sus restos fueron velados en la
Funeraria San Clara situada en la esquina que forman las calles Pedro Thómas y
José Marte.
Al terminar las lluvias, fue
llevado al Palacio de Justicia, localizado en la calle Pedro Thómas número 54.
De ahí, duraron varios minutos
en las que fuera su oficina de abogado en la calle Alejandro Bueno, entre las
calles San Ignacio y Restauración.
Luego, partieron al cementerio
municipal hasta su morada final.
En todo el trayecto, ojos humedecidos
de familiares y allegados, que deploraban sumida al infinito.
Ciudadano valorado,
desprendidos de lo material, solidario, defensor de las causas justas, nobles,
crítico acerbo de las arbitrariedades de poderosos contra débiles.
Defensor “feroz” contra el terror implantado esos oprobiosos 12 años del balaguerato
y su temible banda colorá del gobierno del doctor Joaquín Balaguer desde el año
1966 al 1978.
Jóvenes que eran encerrados de
forma arbitraria en la policía y guardias eran defendidos gratis en los tribunales
por Saint Hilaire Cabrera que siempre lograba sacarlos libres.
Hoy, que se ha ido al infinito,
la sociedad sabanetera lo despide y se solidariza con sus deudos.
Una nitrida legación del Indenor encabezada por Iris Tejada, secretaria del presidente de ese organismo, monseñor Sinencio Peralta Checo,. asistió al funeral de Saint Hilaire, quien en una ocasión, ostentó el cargo de director ejecutivo de ese organismo regional.
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