No a la mentira

Por Marcelo Peralta
Si esto se permite ¿Para qué trabajar con seriedad?
  
Con la ética, legalidad, valores morales y actitudes del ciudadano no se juega.

A la licenciada Claudia Díaz Canaán, Magistrada del Juzgado de Instrucción en la provincia Santiago Rodríguez ubicada en la Región Noroeste la quieren satanizar por actuar bajo el marco de la Ley.

¿Pero quién la está acusando?

Una “arrancada errónea del Director General de Migración, abogado José Ricardo Taveras, cuya institución esta desacreditada que él como incumbente no ha sido capaz de poner en orden desde que llegara al cargo.

Al decir de las quejas hasta de los mismos haitianos que laboran en zonas donde se construyen obras de que inspectores de Migración y militares van los días de pagos a extorsionarlos en contubernio con los dueños de las edificaciones.

Lo que Taveras Blanco debe investigar son las quejas contra Migración llegan a tal extremo que se les califica como una corporación de extorsionadores.

La honorable magistrada Canaán y el ganadero Juan Paulino Rodríguez, son dos víctimas de los abusos de la Dirección General de Migración y del Ejercito de la República Dominicana.

Juan Paulino Rodríguez ha sido víctima de un abuso de dos guardias que se montaron en un camión en la parte trasera sin permiso y uno de ellos se cayó sufriendo daños corporales y el otro se lanzo a auxiliar a su compañero de arma.

Ahora, ambos “sinvergüenzas” con la complicidad de fiscal titular Martha González, una mujer colocada de “tirabuzón” en un tan delicado como este lo utiliza para atropellar honra como la ganada por Rodríguez, un hombre que solo conoce el trabajo digno. 

La fiscal González rehusó acogerse a pruebas de uin celular y un pedazo de la cacha del fusil propiedad de uno de los soldados, lo que evidencia que ambos se encaramaron en la parte trasera del camión sin permiso y uno de ellos se cayó al pavimento.

Los dos militares están hablando mentiras influenciados por algunos de sus superiores para dañar la honra de Juan Paulino Rodríguez, porque uno de sus hijos es pelotero de Grandes Ligas y hay que sacarle dinero a como dé lugar, porque el hombre de trabajo y serio parece no tener valor en este país.

Claudia Díaz Canaán es de las funcionarias judiciales que reconoce y valora la especificidad del ser humano como lo hizo con Juan Paulino Rodríguez, a quien supuestamente permitió ir a dormir a su casa porque estaba detenido y es conocido por su solvencia moral.

¿Cuántas criminales, banqueros, políticos, ladrones, narcotraficantes, desfalcadores del erario público que se han hecho multimillonarios no les han permitido ir a dormir a sus hogares?.

¿A caso es la primera vez que esto sucede en Santiago Rodríguez y en la República Dominicana?

Lo que debe cuestionárseles al Director General de Migración es el hecho del por qué la República Dominicana está llena de haitianos ilegales?.

Juan Paulino Rodríguez no es traficante de haitianos.

Lo que si debe ser cuestionable es el abuso de poder de la Fiscalía de Santiago Rodríguez que no ha sido incapaz de investigar a fondo este caso.

Que esa misma institución procedió de manera ligera para complacer a esos dos guardias mentirosos quienes no son dignos de vestir el uniforme de la Patria.

Es tan burda la mentira de esos dos guardias que se contradicen porque carecen de asidero.

El que está internado en el centro de salud privado dice que el caso sucedió en pata de Vaca, cuando la realidad es que fue en el trayecto hacia Los Tocones cerca de una banca de Lotería.

Que la fiscal Martha González poseyendo evidencias no investiga sino que actuó con ligereza aplicando orden de prisión.

Y la jueza se divorcio de la verdad al imponer la astronómica friolera de 25 millones de pesos en efectivo como garantía económica contra un hombre que no merece ser atropellado de esa manera, hay que la culpa no es suya, sino de los dos militares.

Tanto la fiscal titular, la fiscal adjunta comisionada; la jueza autora de la garantía económica, decisión que deberá ser insertada en los libros de records Güines; los dos guardias que se treparon sin permisos en el camión y uno de ellos se cayó y el otro se tira a auxiliarlo y sus superiores que creen las burdas mentiras, si se quiere actuar con transparencia, todos deben ser investigados y de los resultados obtenidos, sancionados, cancelados y traducidos a la Justicia Ordinaria como lo dicta la Ley.

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