Invidente de Moncion provincia Santiago Rodríguez descolla como cantante lírica en Estados Unidos.
Nueva Jersey,
Estados Unidos.- Si se pudiera hacer una retrospectiva de la vida de Janette Márquez Valerio, habría que empezar por la decisión
de sus padres, Miguel Márquez y Genny Valerio de no escatimar esfuerzos para
que ella se desarrolle a pesar de faltar la visión.
La joven aunque naciera en Estados
Unidos, su padre es nativo de Monción provincia Santiago Rodríguez, Región Noroeste
en República Dominicana, desde niña evidenció interés por la música.
Hija de la moncionero provincia
Santiago Rodríguez, Glenny Valerio y Miguel Márquez.
Admiradora del cantante y compositor puertoplateño Juan Lockward por el
contenido de sus canciones.
La cantante lirica Janette Márquez Valerio y su madre Glenny Valerio de
Márquez.
Entre sus mejores canciones figuran “Oh Noche Santa”, “Noche de Paz” y “Por Ti Volaré”,
Entre sus mejores canciones figuran “Oh Noche Santa”, “Noche de Paz” y “Por Ti Volaré”,
Quedó ciega a causa de glaucoma congénito,
que apenas ha visto ráfagas de luz, pero esa limitación no le ha impedido
alcanzar el éxito ni la felicidad, “porque me considero una persona normal, no
me estigmatizo”.
Se motivó a cantar inspirada en el compositor Juan Luis Guerra.
“Yo admiro mucho a Juan Luis Guerra por su música, su forma de
ser, lo sencillo que es.
Él me inspiró a ir a la universidad, mucho más cuando supe los
problemas que tuvo en la visión, para mí es una persona excepcional”, indicó.
Respecto a los compositores clásicos dice que prefiere a Mozart,
Vivaldi y Beethoven.
Es admiradora de la cantante lírica la italiana Cecilia Bartoli,
una mezzosoprano de ligera coloratura especializada en obras de Mozart y
Rossini.
Anhelos:
Su sueño era ser maestra para educar a personas con
discapacidades, pero en el Estado de New Jersey no le permitieron ingresar a la
carrera porque su enfermedad le impedía obtener la certificación para enseñar.
Uno de sus grandes anhelos es inspirar a personas que están en
igual condición que ella, pues entiende que la música le ha ayudado a derribar
las barreras de la exclusión.
“Yo me tragué las lágrimas, y simplemente le dije al director no
hay problemas, pero yo de aquí no me voy, y ten por seguro que yo me voy a
graduar”, recuerda con los ojos enturbiados por las lágrimas.
Janette Márquez Valerio decidió entonces cambiar a psicología, entiende
que ha sido beneficioso, porque cuando concluya sus estudios podrá trabajar con
niños especiales, ayudarles a librar las batallas que ella ya ha enfrentado por
su discapacidad visual.
“Hay que tener fe y perseverancia, porque Dios envía personas
como yo para hacerles entender a otros que no hay límites, sino límites humanos”.
Ningún tipo de discriminación me ha detenido, porque desde
pequeña mis padres me enseñaron que no había obstáculos que no fuera capaz de
vencer para alcanzar mis sueños”.
Le encanta la historia, la literatura y las ciencias políticas,
pero sobre todo la filosofía, porque entiende que le ha ayudado a analizar y
reflexionar sobre las etapas difíciles que le ha tocado vivir.
Llamado.
Dice que la música ha sido su medicina.
Atribuye la discriminación contra las personas con
discapacidades a la falta de conocimiento.
Precisa que cuando aceptó su realidad, estuvo en capacidad de
transmitir a los demás la necesidad de aceptar su condición.
Dice que cuando está en el escenario solo piensa que tiene una
voz, pero no sólo enfocada en el aspecto artístico, sino como un instrumento
para expresar que se pueden vencer las limitaciones.
Tiene claro que puede ser una inspiración para que desde los
poderes del Estado se fijen en las personas con discapacidades y se diseñen
políticas a su favor.
“Para mí la música ha sido un milagro y mí medicina”.
Dice conocer niños autistas que la música es su forma de
expresarse y transmitir lo que sienten.
Yo pienso que Dios tiene un propósito con cada persona, y eso
hay que apoyarlo”.
Recuerdos del pasado.
“A mí me pasaron muchas
cosas que como niña no entendía y que todavía no entiendo.
Por eso la música es
algo tan necesario y muy importante en mi vida”, al asegurar que llegar a donde
está le ha costado muchos años de sacrificio, trabajo, batalla, e inclusive de
silencio.
Es una
joven intérprete clásica que comienza a trillar el camino al éxito.
Una discapacidad congénita en
la vista no ha sido obstáculo para apostar al canto como carrera, y en Estados
Unidos, donde reside, ha logrado escalar importantes posiciones en la
universidad de Universidad Westminter Choir, del Estado de New Jersey.
En el país también ha tenido
la oportunidad de mostrar su talento.
Se confiesa admiradora de
figuras como Michel Camilo, Juan Luis Guerra y del maestro José Antonio Molina.
A pesar de las condiciones
excepcionales de su voz, sus padres siempre le han llevado de la mano en su
proceso de formación.
Es parte del Coro Estatal
femenino de New Jersey.
Sus logros comenzaron en 2011,
cuando ingresó al conservatorio de música en New Jersey.
Ha participado en conciertos
en Estados Unidos en escenarios como Carnegie Hall, Teatro United Palace con oportunidad
de actuar junto a orquestas sinfónicas y filarmónicas.
Agradece.
Siempre
menciona y agradece a Roberto Weill, fundador y presidente del Salón de la Fama
del Béisbol Latino, por hacer realidad su participación en la ceremonia cuando
se produjo la exaltación del lanzador Pedro Martínez al Salón de la Fama del
Béisbol de Grandes Ligas, en Cooperstown, Estados Unidos.
Su madre y
representante, Glenny Valerio de Márquez, dijo que se siente muy emocionada con la
participación de su hija en la ceremonia en Cooperstown la que siempre recordará.
En República Dominicana
ha cantando en Santo Domingo, Santiago, Moca, Bani y otras ciudades.
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Saludos.
Mi blogs tiene problemas e ignoro las razones