Tres periodistas que cubren el mundial de fútbol en Qatar han muertos de forma misteriosa.

El primer periodista en morir fue el estadounidense Grant Wahl, el segundo es el reportero gráfico Khalid Al-Misslam, de Al Kass TV y el tercero es Roger Pierce de la cadena ITV Sports.

Han sido hallado muertos en habitaciones de sus respectivos hoteles donde se hospedaban.

Uno de ello había ondeado una bandera promoviendo a homosexuales y los dos restantes se pronunciaron en contra del régimen de Qatar.

Este drama que se ha vivido en la Copa Mundial de Fútbol de las muertes de tres periodistas despierta suspicacia.

Se atribuye a infarto, sin embargo, existentes conjeturas respecto a sus decesos.

Por otra parte el gobierno de Marruecos cuyo equipo en la recta final se enfrenta a Francia ha ordenado enviar 30 aviones con 300 fanáticos cada uno al juego.

La aerolínea marroquí Royal Air Maroc programó 30 vuelos especiales Casablanca-Doha a transportar al público marroquí que desea apoyar a su equipo mañana miércoles en las semifinales del Mundial.

La compañía aérea marroquí explicó en un comunicado que los vuelos incluidos en este “dispositivo histórico” serán operados por aviones jumbo, de los que transportan más de 300 pasajeros hoy martes y miércoles.

La nota agrega que, al igual que los vuelos fletados en los partidos anteriores, se trata de billetes con una tarifa fija de 450 euros ida y vuelta.

El comunicado no revela el número de billetes que serán puestos en venta, pero la prensa marroquí estima que está operación aérea permitirá el transporte de 9 mil aficionados.

Según la RAM, este “puente aéreo” se ha lanzado en colaboración con el Ministerio de Deportes y la Real Federación Marroquí de Fútbol, tras la histórica calificación de los “leones del Atlas” para las semifinales de la Copa del Mundo.

La compañía marroquí había operado siete vuelos especiales con salida desde Casablanca y siete vuelos de vuelta el día 11, operados por aviones con una capacidad de entre 274 y 340 asientos cada uno, para el público marroquí que asistió al partido de cuartos del pasado sábado contra Portugal en Qatar.