Día de los muertos
Foto ilustrativa
Por Marcelo Peralta
El miedo a los muertos garantiza la existencia de los
vivos en la tierra.
Una honesta muerte redime una vida torpe, y morir es
tan sencillo y aceptable como nacer, si en los más adentro de nuestra consciencia
sobemos convivir.
Si observamos y dejamos a un lado las vanidades, el
orgullo de poseer bienes materiales que en ocasiones muchos los han adquiridos
mediante el “dolo” al desempeñar cargos en el Estado, nos daremos cuenta de cuán
débil es el cuerpo del hombre y de la mujer.
A la hora que nos llega de la muerte, no importa cuán
llena tengamos la barriga, la cantidad de dinero depositado en bancos, vehículos
de lujos, viviendas, villas en los centros turísticos, y para colmo, nos
entierran con una mortaja sin bolsillos para que no nos llevemos nada.
Acumular y amasar fortunas de dinero es lo que nos
genera es “infelicidad”, ya que se enferma de la mente, estamos sobresaltos de
ser víctima de los delincuentes y al morir los ricos dejan diatr4ibas ente
hijos e hijas para ver a quien les toca mas y a quien menos.
Si analizamos desde distintas ópticas, nos daremos
cuenta que la muerte es, en definitiva, la rasera que a todos, sin importar
posiciones económicas, religiosas, sociales, color, tamaño, nacionalidad, vehículos
de lujos tengamos en las casas, las mansiones, esas fantasías, a todos y a
todas nos hace iguales.
Hoy 2 de
noviembre, es
el tricentésimo sexto día del año en el calendario gregoriano y el 307 en los años bisiestos, quedando para que finalice el 2014 la cantidad
de 59 días.
Es hoy día de los difuntos,
que es como ponernos a orar por aquellos que han acabado su vida terrenal y, lo
que todavía siguen en estado de purificación en el Purgatorio por las fallas que
disgustas a Nuestro Creador acometidas en este globo terrenal.
Este día fue creado en la doctrina Romana para que las
almas de los seres al tiempo de morir no han sido limpiadas de pecados
veniales, que de pagar sus culpas por
sus transgresiones contra sus semejantes para poder alcanzar la Visión
Beatífica.
Hay quienes creen que el Día de los Difuntos hay que
cogerlo para las coxas paganas en sentido general, el bullicio, las acciones
indecorosas, aunque cada ser humano es dueño de sí, de sus acciones y sus consecuencias.
Quien suscribe, en cambio, mantiene su tradición
materna de permanecer en su hogar sosegado, prendo una luz a mis seres queridos
y observo a la distancia a quienes, creen que este día es para la “fanfarria” y
comprendo que cada cabeza es un mundo.
La fiesta de los difuntos fue establecida en el ritual
cristiano, y el libro de la adoración de los difuntos señala que las mitologías de todas las naciones antiguas están entretejidas con los
sucesos del Diluvio.
Paz a quienes se nos han ido, porque los
que estamos aquí pecando en la tierra, desfilaremos por el mismo trayecto.
Comentarios
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Saludos.
Mi blogs tiene problemas e ignoro las razones