¡No más humillaciones!


Por Marcelo Peralta
mperiodista1958@hotmail.com

prensaglobaldigital
El país debe unirse y frenar las humillaciones, intimidaciones, bombardeos, paños tibios con que hemos tratado a los haitianos y organismos internacionales.

Somos una Nación Libre, Soberana, Independiente, con leyes, Constitución, Bandera, Escudo, Himno, aunque políticos y empresarios nos han endeudado con organismos crediticios internacionales, pero jamás debemos seguir permitiendo que sigan vejándonos y humillándonos.
El Presidente Danilo Medina debe instruir a sus funcionarios para aplicar las leyes que regulan la presencia de los ilegales como lo hacen otras naciones y expulsar a esas lacras que vienen a pisotear las tierras de quisqueyanas a ofendernos y hacer acusaciones de supuestas violaciones a Derechos Humanos.
Nuestro Presidente Danilo Medina ha defendido en foros internacionales la Soberanía Nacional y se impone que los funcionarios diplomáticos lo imiten en sus respectivas naciones donde han sido nombrados.

¿Por qué esos criticones gratuitos no van a Brasil, Las Bahamas, Canadá y otras naciones a hablar de las violaciones de Derechos Humanos y deportaciones de haitianos que ellos hacen?

Hay que defender de todas maneras y en cualquier terreno el querer y sentir de los ciudadanos sensatos quienes aspiran a tener un mejor país y libre de “LACRAS HUMANAS”, que vienen a nuestra tierra a criticarnos y a humillarnos.
Defendamos la libertad ciudadana, Soberanía Nacional y que se aplique la Ley migracion como hacen otras naciones con sus ilegales.
Los haitianos son como el aguila que quienes los alimentan tarde que temprano, “sacan las garras y les arrancan los ojos”.
Hay que acabar con los paños tibios, porque eso no funciona y decidirse a aplicar las leyes con severidad y el funcionario que rehúse a catarla que se tramite su cancelación y sometimiento a la Justicia.
El gobierno tiene que hacer las recomendaciones a sus funcionarios recordándoles el contenido de la ley que prohíbe la presencia de ilegales en el país.
Las denuncias alegres de gringos metiches, de los antidominicanos, títeres regionales y los famélicos mentales haitianos hay que desarmarlas y acabar moralmente con esas campañas, que por dinero desacreditan nuestra nación.
El gobierno sabe lo que se debe hacer y lo que no se debe hacer en el caso de las campañas difamatorias y la presencia de ilegales haitianos que nos conllevan gastos, su presencia es dañina y nos transmiten enfermedades e infaustos hábitos y costumbres.
Estados Unidos, Canadá, Francia, Inglaterra, Unión Económica, junto a sacerdotes y periodistas dominicanos con ONGs y pagados, el gobierno de Danilo Medina con sus herramientas deben neutralizarlos en sus pretensiones.

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