.A 7 años de Olga sobreviviente narra penalidades.

Ernesto  Berrios Rodríguez.

Por Marcelo Peralta

El historiador escribe la historia de un pueblo, de las personas sobresalientes, las trágicas, las positivas.

Con esa furia y fortaleza salia el agua de la presa. Foto Marcelo Peralta 13-12-2007.  

Todos los días suceden hechos diversos y Ernesto  Berrios Rodríguez, de origen puertorriqueño y el día 12 de diciembre del 2007 estuvo al quedar como copla sin alegría.

A decenas de metros de distancia del rio Yaque del Norte, casas y vehiculos fueron destruidos. Foto Marcelo Peralta 14-12-2007.

Descansaba en una casa cercana a la ribera del rio Yaque del Norte en el sector  Nibaje, al Sur de Santiago y un estruendo inesperado en horas de la noche lo “manda las aguas como un barco a la deriva”.

Todo bajo agua en la zona Sur y Noroeste de Santiago. Fuente externa.

Iba de acá hacia allá dentro de las aguas turbulentas del rio Yaque del Norte, nadando a oscura, a altas horas de la noche, sin esperanzas de sobrevivir.

 Gentes en el barrio El Tamarindo en Rafey buscando pertenencias.

No tenía perspectivas, aunque rebosado de fe y coraje cuando miles de litros cúbicos de agua fueron vertidos al rio Yaque del Norte durante la Tormenta Olga, que según, se debió a un error humano, de quien, por estar “borracho” abrió todas las compuertas en vez de la que llevaba la número 5.

Berrios Rodríguez, relata que nunca perdió las esperanzas de salir con vida de las fuertes crecidas como si se tratara del arado arrastrado por los bueyes que lo arrasa todo.

Cuenta que cada minuto transcurría como el azadón uncido a la tierra que se llevaba todo a su paso, pero con fortaleza de seguir luchando por su vida.

Berrios Rodríguez fue uno de cientos de personas que vivieron horas aciagas y desesperanzas, esa noche del 12 de diciembre del 2007. 

A Berrios Rodríguez, la vida se iba apagando a cada instante, pero logra salvarse gracias a varias personas, que trepadas en un árbol de samán a orillas del rio lo auxiliaron iluminando el trayecto con la luz de una linterna.

Logra ascender al tronco y subir, pero su agonía no termino ahí, sino que todos, debieron permanecer en las ramas del árbol hasta el día siguiente que por altruismo del dirigente reformista Amable Aristy Castro, que al día siguiente a las diez de la mañana prestara su helicóptero y los rescataron.

A pesar del drama, dice que tuvo fe en el Altísimo y las energías que nunca faltaron para luchar, sobrevivir, y con el pasar el tiempo, todo se fue apagando, y hoy, su vida es más llevadera.  

Su edad avanzada no fue obstáculo para nadar, su resistencia, valentía, logro sobreponerse y hoy puede contar con lujo de detalle la tragedia proveniente desde la presa Tavera.

Quienes pudieron sobrevivir, hoy a siete anos de esta catástrofe, pueden respirar en paz, pero abatidos por el dolor de ver perdido a seres amados y respetados clon quienes compartían a cada hora.

La verdadera y real causa de esa tragedia nunca se ha llegado a saber, lo que sí se sabe que hubo muchos muertos, heridos, desaparecidos, destrucciones de casas, edificaciones y pérdidas multimillonarias.

Quizás, obedeció a un error humano como se ha dicho, en sus afanes de lucro político, que la sociedad de Santiago no ha llegado a entender del por qué perdió a muchos de sus ciudadanos.

Lo sí es cierto, que a pesar de los rumores y conjeturas, las autoridades policiales ni judiciales se preocuparon en investigar y llevar a los culpables al  banquillo de los acusados.

Lo que es real y verdadero es, que las poblaciones humanas y comerciales que habitaban en las riveras del rio Yaque del Norte quedaron borradas de la faz de la tierra por las furias de las aguas de la  tormenta Olga.

Los afectados que lograron sobrevivir han permanecidos alejados de las aguas del rio Yaque del Norte, pero engañados por quienes nos gobernaban en esa época.

El Ministerio de Medio Ambiente repobló todas las riberas del rio que había ocupadas y construido viviendas, áreas autorizadas por políticos de todos los partidos.

La historia de un pueblo no está escrita con esos signos de políticos partidistas que ellos cuidan tanto como si fuera de su propiedad.

Cualquier político "vira lata" cree que puede hacer y deshacer de las propiedades de los dominicanos, aunque logro llevarse las tajadas por la ignorancia de sus gentes.

El hombre de trabajo la lleva como una gran mochila en su espalda que les da alas y otras visiones a las que donde los políticos no acceden. 

Por el desbordamiento murieron hombres, mujeres, niños, hubo pérdidas multimillonarias en  las destrucciones de cientos de casas, agencias de vehículos, edificios públicos, privados, agencias casas de cambios, colmados, cuyos dueños vieron su porvenir truncado.

Reaccion:

Una comisión que investigó el desagüe de la presa de Tavera, que provocó en diciembre pasado al menos 34 muertos y varios desaparecidos en la ciudad dominicana de Santiago (norte), determinó este miércoles que hubo un manejo incorrecto de la hidroeléctrica.

-Se recuerda que el Presidente de la República designó una comisión oficial el 17 de diciembre pasado, la cual aún no ha dado los resultados sobre este caso. Esta comisión la preside el secretario de las Fuerzas Armadas, teniente general, Ramón Antonio Aquino García e integrada por la Oficina Nacional de Meteorología, el Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (CODIA), la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCAMAIMA), la Universidad Tecnológica de Santiago (UTESA), la Secretaría de Obras Públicas, además, representantes del Senado y la Cámara de Diputados, entre otros; a esta comisión se le estableció un plazo de 90 días para rendir su informe, el cual se espera para el 17 de marzo de este año.-

El portavoz de la comisión, Ervin Vargas, dijo que las autoridades no desaguaron a tiempo el embalse tan pronto recibieron la información de que la zona recibiría las lluvias de la tormenta tropical "Olga".

El informe establece que durante las 40 horas comprendidas entre el día 9 al 11 de diciembre pasados, el embalse de la hidroeléctrica se mantuvo a la altura de 325,10 metros sobre el nivel del mar y que no se produjo el necesario descenso que demanda el instructivo de operaciones de las presas.