Tres años hace este martes que mataron a Diócles Saint Hilaire y familiares esperan por justicia.


Diócles Saint Hilaire.

Por Marcelo Peralta.

San Ignacio de Sabaneta, Santiago Rodríguez, R.D.- Este martes se cumplen 3 años del vil asesinato del exgerente del Banco Agrícola, Diócles Saint Hilaire, donde familiares y la sociedad San Ignacio de Sabaneta, todavía espera que las autoridades judiciales apresen a los autores.

El exgerente del BAGRICOLA fue asesinado a palos en una finca de su propiedad en el paraje Arenazo de la sección Las Caobas en Santiago Rodríguez, el día 5 de enero del 2013, y a pesar del dolor ocasionado, las autoridades policiales y judiciales son censuradas por la inercia en hallar a quienes cometieron este crimen que consternó a la sociedad.

A la muerte violenta de Saint Hilaire, las autoridades policiales y judiciales no han podido descubrir quienes cometieron el hecho y evidencia la incapacidad para saberse los autores, mientras la impotencia, tristeza, dolor y la frustración de familiares y la sociedad los invaden y reclaman que se profundice a fin de que el hecho no quede impune.

El médico legista que examinó el cadáver de Saint Hilaire, doctor Jorge Rodríguez diagnosticó que falleció a causa de golpes contundentes en la cabeza ocasionados por desconocidos hasta el momento.

Cuando sucedió la tragedia el Fiscal Adunto licenciado Rafael Bueno Rodríguez y el director de la 16 Compañía Policía aquí, Francisco Morrobel Villanueva encabezaron las investigaciones y a pesar de que se sospecha que fueron haitianos que trabajaban en la finca nunca se ha podido saber quiénes fueron.
 A la hora de ser asesinado, Saint Hilaire tenía 70 años de edad y más de 30 laborando en la sucursal del Banco Agrícola quien ya estaba pensionado por antigüedad en el servicio. Vivía en la calle San Ignacio en el centro de la ciudad y provenía de una familia noble con apellido de “abolengo”. 
Estuvo casado con la doctora Miledys Susana Sosa Rivas, quienes procrearon hijos y ostentó las funciones de jueza del Tribunal Primera Instancia en la provincia Santiago Rodríguez.


El exgerente del BAGRICOLA fue asesinado a palos en una finca de su propiedad en el paraje Arenazo de la sección Las Caobas en Santiago Rodríguez, el día 5 de enero del 2013, y a pesar del dolor ocasionado, las autoridades policiales y judiciales son censuradas por la inercia en hallar a quienes cometieron este crimen que consternó a la sociedad. A pesar de la muerte violenta de Saint Hilaire, las autoridades policiales y judiciales no han podido descubrir quienes cometieron el hecho evidenciando incapacidad para saberse los autores, mientras la impotencia, tristeza, dolor, la frustración de familiares y la sociedad los invaden y reclaman que se profundice a fin de que el hecho no quede impune. El médico legista que examinó el cadáver de Saint Hilaire, doctor Jorge Rodríguez diagnosticó que falleció a causa de golpes contundentes en la cabeza ocasionados por desconocidos hasta el momento. Cuando sucedió la tragedia el Fiscal Adunto licenciado Rafael Bueno Rodríguez y el director de la 16 Compañía Policía aquí, Francisco Morrobel Villanueva encabezaron las investigaciones y a pesar de que se sospecha que fueron haitianos que trabajaban en la finca nunca se ha podido saber quiénes fueron.
 A la hora de ser asesinado, Saint Hilaire tenía 70 años de edad y más de 30 laborando en la sucursal del Banco Agrícola quien ya estaba pensionado por antigüedad en el servicio.


Vivía en la calle San Ignacio en el centro de la ciudad y provenía de una familia noble con apellido de “abolengo”. Estuvo casado con la doctora Miledys Susana Sosa Rivas, quienes procrearon hijos y ostentó las funciones de jueza del Tribunal Primera Instancia en la provincia Santiago Rodríguez.


El exgerente del BAGRICOLA fue asesinado a palos en una finca de su propiedad en el paraje Arenazo de la sección Las Caobas en Santiago Rodríguez, el día 5 de enero del 2013, y a pesar del dolor ocasionado, las autoridades policiales y judiciales son censuradas por la inercia en hallar a quienes cometieron este crimen que consternó a la sociedad.

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