Deforestación despiadada

 
La deforestación crece en la frontera
Por Marcelo Peralta
La Tierra tiene de 200 mil años de existencia.

Es explotada de forma despiadada por el hombre.

El hombre se aprovecha de sus riquezas para saciar apetencias personales.

La reserva boscosa y maderera se extingue.

Con esa práctica se afectan los caudales de los rios, arroyos y las venas acuiferas van desapareciendo. 

La naturaleza es castigada por el corte de árboles para hacer carbón.
De tanto  maltrato que recibe está llegando la tierra a quedar sin árboles.

La mayoría de organizaciones sociales, culturales, políticas parece con el caso de la deforestació es como "que se le  fue la  guagua".

La importación de cultura por la presencia irregular de haitianos es otro grave malestar.

El haitiano tiene cultura diferente al dominicano y por ello afecta más el ambiente.

Hay otro grave malestar que es la polución emanada por los miles de vehículos en las calles.

Ello produce un franco deterioro y contaminación del medio ambiente.

La presencia masiva de haitianos conlleva a la acelerar su deterioro, porque cortan las reservas boscosas sin criterios como hicieron en Haití.

Quienes tienen amasan dinero sin importar su procedencia creyendo que los recursos naturales les pertenecen.

Saquean riquezas naturales y hacen desaparecer los medios que suplen de agua a miles de seres humanos.

Los emporios internacionales sacan oro y otros minerales de nuestras tierras y se los llevan disfrazados fuera del país, empobreciendo a sus habitantes.

Utilizan el poder monetaria para comprar conciencia.

Estas empresas disfrazan los pedazos de oro para llevarlos a Estados Unidos y Canadá a fin de tener amplias ganancias.

Luego que socavan nuestras tierras y se llevan los minerales dejan a los pueblos llenos de hoyos, desolados y sus pobladores enfermos por la contaminación de sus potentes equipos.

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