Día del Locutor.

Resultado de imagen para fotos de locutores

Por Marcelo Peralta.
Hoy 18 de abril es el Día del Locutor.

Fecha consagrada a los hombres u mujeres que detrás del micrófono hablan “bien”.


Muchos de esos abnegados seres humanos han hecho de este oficio una especie de “sacerdocio”.


Otros, en cambio, lo utilizan para hacer “negocios”, y en algunos de los casos, por sus transacciones cuestionables hasta han perdido la vida.


Pero, aunque aparezcan algunos “malos” dominicanos, no se puede ni debe juzgarse a todos por igual.


Un locutor es la persona que se dedica a presentar noticias, música en los programas de radio y televisión.


Debe ser ejemplo de disciplina, pulcritud, decencia, solvencia moral, espiritual y digno para que sea orgullo de la “Patria”.


Sin embargo, la descripción, en muchas ciudades del país es pobre y anacrónica para definir lo que es un locutor hoy en día.


Hay gentes que hablan detrás de un  micrófono que violan las reglas, carecen de preparación y pobres en solvencia moral, aunque andan orondo por la cantidad de dinero acumulado.


El locutor, es el encargado de darle vida a infinidad de proyectos usando como vehículo “La Voz”.

Un verdadero locutor desarrolla su labor con protocolos de transferencia de datos que le permite hacer entregas de material para llegar a sus oyentes hasta los lugares más recónditos del planeta.


Hoy día un locutor ya no es solo un locutor, sino intérprete y cómplice de echar mano a lo que “venga”.


La gran mayoría de los individuos piensan que estudiar la carrera de Ciencias de la Comunicación y Periodismo, les permitirá llegar a ser grandes locutores, no hay ilusión más falsa que eso.


Estas licenciaturas tocan el tema parcialmente, es muy difícil que el individuo entienda la amplitud de la disciplina en un lapso tan breve.


Si bien es cierto, en el pasado no se estudiaba para locutor como ahora, pues se trataba de un oficio que se aprendía en la cabina de radio, lo cual, derivó en que muchos de los interesados adquirieran muy malos hábitos en el uso del instrumento vocal.


Ya existen centros de aprendizaje y escuelas especializadas para los interesados en desarrollarse dentro del oficio de locutor.


En la ciudad de Santiago se hallan escuelas e institutos para la formación del talento, perdida del miedo escénico, el artístico  y la manera de tratar de hablar bien.


Además, hay maestros en solitario que han desarrollado métodos para la impartición de clase y quienes han tenido una brillante carrera.


De todos modos, buenos y malos, vayan nuestras felicitaciones a quienes fueron, son y hasta los que hoy dicen que ser locutores.

Comentarios