Fallece en Nueva York policía católico que perdonó a quien lo dejó discapacitado 30 años.

Por Diego Lopez Marina.
NUEVA YORK,- Ayer 11 de enero del 2017 falleció a los 59 años, Steven McDonald, un héroe católico de la Policía de Nueva York en Estados Unidos conocido por haber perdonado a la persona que le disparó tres veces por la espalda y lo dejó cuadripléjico hace más de 30 años.
La cadena NBC4 dice que McDonald había estado hospitalizado desde el  viernes y falleció de un ataque cardiaco en el North Shore University Hospital de Long Island.
En su memoria, el Arzobispo de Nueva York, Cardenal Timothy Dolan, quien además fue su amigo, describió en un comunicado al detective como “un ícono de la misericordia y el perdón.
Lo define como un profeta de la dignidad de toda la vida humana, un brillante ejemplo de lo mejor que tiene el Departamento de Policía de Nueva York, un amoroso esposo, padre, un católico ferviente y fiel.
En 1986 Steven recibió 6 disparos en la cabeza, cuello y columna hecho cometido por el asaltante Shavad Jones, un joven de 15 años al cual perdonó públicamente años después.
En su vida, el detective inspiró a varios policías, hasta a su propio hijo que se volvería Policía de Nueva York en el 2010 y que en la actualidad se desempeña como detective.
El Cardenal Dolan aseguró que la tragedia habría “sido suficiente para convertir a alguien en un ser amargo, resentido, enojado con Dios y con el mundo.
Dolan alabó el valor del agente Steven McDonald”.
“En lugar de eso, perdonó al joven que le disparó, e incluso testificó en su favor en su audiencia de libertad condicional.
 Se convirtió en un fuerte defensor de la paz y habló a menudo de la necesidad de mostrar misericordia a los demás”.
Steven solía dar discursos y guiar peregrinaciones alrededor del mundo, e inclusive, junto al Cardenal Dolan pensaban recientemente dirigir una peregrinación al Santuario de Nuestra Señora de Lourdes en Francia “para traer a los que estaban enfermos y heridos en mente y cuerpo, y orar por su curación”.
El Purpurado afirmó que aunque el mundo pensara que McDonald parecía incapaz de ofrecer algo de valor a la sociedad, “éste demostró que nuestro valor nunca descansa en lo que podemos hacer, sino en quién somos, hijos e hijas de un Dios amoroso que da a cada uno de nosotros su imagen y semejanza”.
“Todo esto se reflejaba en la notable fe católica de Steven. Cuando lo visité en el hospital el domingo pasado, su habitación parecía la Catedral de San Patricio, llena de gente –sacerdotes, policías, familiares, amigos– todos rezando por él cuando estaba cerca de la muerte”, detalló.
También, el Arzobispo de Nueva York pidió a todos los neoyorquinos que recuerden a Steven como el ejemplo de “unidad y reconciliación” en los momentos en que el “estado de ánimo colectivo parezca ser uno de división, rencor y discordia”.
Finalmente se dirigió, Patti Ann y Conor, esposa e hijo de Steven, para agradecerles por el amor y apoyo: “sepan que tendrán un lugar especial en nuestras oraciones al llorar la pérdida de este gran símbolo de Nueva York”.

Este viernes 13 de enero el Cardenal Dolan oficiará una misa por el funeral de McDonald en la catedral de Saint Patrick de Nueva York.

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