Organismos internacionales preocupados por seguridad alimentaria en República Dominicana.
Santo Domingo, R.D.-
Cuatro organismos internacionales mostraron preocupación por la seguridad alimentaria,
establece Sandino Bisono, el Presidente del Consejo Nacional de Defensa a los
Consumidores –CONADECO, al disertar hoy en la por la Federación Nacional de
Comerciantes de la República Dominicana.
El Programa de las
Naciones Unidas para el Desarrollo –PNUD; el Mundial de Alimento -PMA-;
Organización de la Salud-OMS- y la Organización de las Naciones Unidas para
la Agricultura y la Alimentación-FAO- son las entidades a quienes les preocupa la
situación.
Ese criterio es del
licenciado en Ciencias Políticas y Sociales; Periodismo, Sandino Bisono, actual
Presidente del Consejo Nacional
de Defensa al Consumidor-CONADECO-quien afirmó que es un mito del gobierno la
seguridad alimentaria, nutrición e inocuidad.
Bisono sostiene que el PNUD, PMA, OMS y la FAO demuestran que la mala nutrición es una causa directa
de la inseguridad alimentaria, porque impacta de forma negativa a las economías
nacionales y globales, perpetuando la pobreza y el hambre.
A su juicio, la Organización de las Naciones Unidas para
la Agricultura y la Alimentación FAO, en el concierto de países del
mundo ha puesto el tema en escena, contraído compromisos y metas de superación
hasta con fechas fatales como son los acuerdos de los Objetivos de Desarrollo
del Milenio (ODM).
Expuso sus
consideraciones en primer debate relacionado a estos temas organizado por la
Federación Nacional de Comerciantes de la República Dominicana -FENACERD- en
cuya ponencia dijo que estos son temas de gran interés para los consumidores con
el objeto de discusión mundialmente y
que revisten un inusitado interés para el movimiento consumerista a nivel
global.
Ratifica que la
seguridad alimentaria es un derecho fundamental vinculado al desarrollo humano y
que existe cuando todas las personas tienen en todo momento, acceso a
suficientes alimentos sanos y nutritivos, que permitan satisfacer sus
necesidades y disfrutar una vida sana.
Adelanta que en
países pobres y en desarrollado, por ende en República Dominicana que no tienen
estadísticas exactas que determinen la cantidad de alimentos producidos para
satisfacer la dieta del habitantes y se alude a diversos porcentajes como la
demanda satisfecha en un 75%, que de ser cierto sería muy satisfactorio.
No obstante, afirma
que algunos se van al extremo en decir 85%, pero esas son estimaciones que no
son reales.
El dirigente de
CONADECO dice que hoy en día si se cubre sobre un 70% del consumo se
considerada muy buena, porque hay intercambios de bienes, que fluctúan dependiendo del crecimiento de la
economía.
En su opinión, la
economía agrícola local es muy deficiente en comparación con la de los grandes
países ya que aquellos tienen planificaciones, diseñan programas, metas, inversión económica, usan
tecnologías de punta como base del crecimiento de la producción masiva de
bienes de consumo.
Para Bisono, la FAO
define la seguridad alimentaria, cuando la población de un país que tiene en
todo momento acceso físico, económico a los alimentos inocuos y nutritivos,
para satisfacer las necesidades alimenticias de las personas.
“Lo principal es que
la población tenga suficiente dinero para poder comprar los alimentos que
necesita la familia, pero que no vayan a contaminar de enfermedades el buen
desarrollo humano” dijo.
Declara que en donde
hay alimentos protegidos prevalece la importancia de la inocuidad y de
establecer políticas públicas adecuadas para acabar con el hambre.
De acuerdo a Bisono
en la República Dominicana está la Ley 589-16 que crea el Sistema para la
Soberanía y Seguridad Alimentaria y Nutricional, pese a ella su economía ha
crecido a un ritmo del 7% en los últimos dos años y a los avances logrados, en
el país, que de acuerdo a estadísticas aún hay casi 1,3 millones de hambrientos
equivalente a un 12,3% de la población, ha dicho la FAO.
Subraya que la
seguridad alimentaria es el concepto técnico que define quién está libre de hambre
y viene a ser como tener la seguridad de que se comerá de forma suficiente y
adecuada.
Y establece que el
problema de los consumidores es poder accesar a su demanda porque en el mundo que
se produce mucho más alimentos de lo necesario para la vida.
El principal
dirigente de CONADECO subraya que el problema de esta situación radica en la
mala distribución.
Eso así, asegura porque
mientras unos viven en la abundancia y el despilfarro, en la otra versión, el
problema es el hambre rampante, la mala alimentación en que vive más de un
tercio de la población mundial.
Postura:
La FAO fijó su
posición en la trigésima tercera conferencia Regional con sede en Santiago de
Chile efectuada en el 2016 se promovió una serie de políticas para acabar con
el desperdicio de comida en donde más del 40% de la producción de alimentos a
nivel mundial se desecha, se pierde de diversas maneras.
Enfocando
el problema, “en nuestro país, la situación de acceso, inocuidad y
abastecimiento a la demanda de productos está normado por diferentes factores.
Sin
embargo, Bisono dice que mientras por un lado hay abundante oferta, lo que está
en entredicho es la calidad, la inocuidad, seguridad y los altos precios lo que
consumimos.
“Todos
los días nos sorprenden con noticias alarmantes de productos que consumimos que
adquirimos en supermercados, los que carecen de la calidad necesaria; algunos
procesados, no están aptos para el consumo humano, pero que por la falta de
control y supervisión estatal son vendidos a los consumidores” dice.
A
la vez plantea que la mayoría de los consumidores cuando han puesto las grandes
cadenas de supermercados abusan de la confianza de a la venta productos
ilegales, sin registro sanitario, amparados en marcas genéricas y productos
importados con etiquetas en otros idiomas, refechados, traídos a granel,
vencidos, empacados aquí, vendidos, con fecha nueva, violando las leyes y
disposiciones que prohíben la venta al público sin cumplir con el etiquetado
correspondiente.
Denuncia
que al país llegan productos fabricados en Aruba, en China, España y que grupos
los enfundan y colocan números de teléfonos que simplemente no dice nada.
Advierte
que el consumidor, a quien se le vulnera el derecho a estar informado a elegir
con responsabilidad carece de alternativa teniendo que comparar esos productos sin
fijarse en la calidad de los mismos.
Siempre
y de acuerdo al dirigente de CONADECO que eso es grave en que ninguna autoridad
competente ha podido corregir, a pesar de las denuncias contantes, puntuales y
precisas.
Reitera
que CONADECO ha venido denunciado esa mala práctica y durante más de un año
tiene la campaña “Yo no compro productos sin registro sanitario”, y aparecer
combatirlo es tan difícil porque ninguna autoridad ha podido.
“Y
hemos tenido que quedarnos expectantes ante dos anuncios bulteros aunque sin
ningún resultados, que se hicieron desde el Palacio Nacional, con la promesa de
que a partir de enero pasado no habría en el territorio nacional establecimientos
con productos a la venta sin el debido Registro Sanitario.
Fija
posición respecto al problema el que dice se agrava cuando vemos que en el país
el negocio de la leche se ha tornado tan difícil que ya los consumidores no
saben si la que hay en el mercado es leche de vaca, reconstituida, hidratada de
polvo o alguna fórmula láctea no acta para el uso humano como sucedió
recientemente.
Enumera
que los productos derivados de la leche, son un laberinto obscuro y tétrico, ya
no hay conciencia en cuál es la calidad del queso, mantequilla o yogurt el que
se vende en los establecimientos.
Denuncia
la existencia de una negativa a etiquetar la leche, mientras el gobierno para
este año autorizó la importación a través del DR-CAFTA de 8,400 toneladas del
producto en polvo exonerada de impuestos beneficiando en nada al consumidor,
sino que en su mayoría fueron a parar a las manos de 5 industrias procesadoras.
No
obstante, el presidente de CONADECO dice que a la hora de el consumidor elegir
ese producto procesado, su etiqueta no expresa la información adecuada si no
que mienten ocultando datos que son básicos para el consumidor poder hacer su
elección.
En
cuanto al queso, los hay de muy buena calidad y que cumplen con las normas.
Afirma
que de las 740 fábricas de queso registradas en el país solo 14 tienen
pasteurizadoras y 7 tienen laboratorios y para colmo más del 90% carecen de
Registro Sanitario ni pasan la prueba de higiene y salubridad que garantice al
consumidor un producto inocuo apto para consumir.
Si
el queso Cheddar que es más que queso de freír con colorantes, entonces existe
que el producto no es real sino un engaño al consumidor que lo paga como tal.
La seguridad y la inocuidad en muchos
productos de consumo masivo no es más que una quimera, porque si nos vamos por
el lado de los embutidos y compramos un salami Carnú, por solo poner un
ejemplo, veremos que es un producto no apto para el consumo y que
peligrosamente está compuesto de nitritos, nitratos, nitrosaminas y otras
sustancias químicas que lo convierten en una bomba de toxicidad muy dañina para
el consumo humano y destinado a los sectores más carenciados en los barrios.
Jugos:
El caso de los jugos es otro de los
problemas cuando en la etiqueta te dicen que es jugo puro de naranjas frescas,
pero que dista mucho de serlo, ya que en el país no hay naranjas, pues las
plantaciones fueron afectadas por un parásito traído de África que mató los
naranjales e inclusive en muchas fincas ya están siendo sustituidas por
palmeras, cocoteros y solo basta ver las grandes cantidades de polvo de de
frutas que están importando algunos procesadores de jugos.
Aun con esta realidad, afirma Bisono,
el jugo sigue diciendo en su embase “jugo puro de naranjas”.
Los “jugos o bebidas saborizadas de
frutas” son aun peor, la mayoría son más azúcar que otra cosa porque la materia
prima principal es un químico llamado “cítrico” que con un poco de jugo de
naranja o limón le da el sabor adecuado para que parezca jugo de la propia
fruta multiplicando al 100 por uno la cantidad.
El líder de CONADECO cree que para la
seguridad alimentaria hay que exigir el etiquetado como manda la ley y que
ninguno de los productos procesados como el queso, los embutidos se vendan sin
el sello de calidad para que el consumidor pueda elegir con seguridad.
Contaminación:
Censura que los productos del campo
que se venden en las calles, llenos de lodo, tirados en el suelo, algunos con
la práctica de pintarlos como hacen con la yuca, el ñame con tierra negra o
colorada, contaminándolos con el solo objetivo de engañar el consumidor para
que parezca mocana y de Samana.
Otro es la zanahoria y la remolacha
“lavadas en un tanque en el lodazal” con los pies, es solo una muestra de la
modalidad de la falta de control sanitaria que no cumple Salud Publica.
Pone de ejemplo el mercado de la Avenida
Juan Pablo Duarte en Santo Domingo, el cual no observa la más mínima norma de
sanidad requerida, y las personas que se detengan a verlo, posiblemente no
consuma jamás esos alimentos, pero de ese “mercado” es que come la capital.
Culpa a las autoridades del Ayuntamiento
y los gobiernos que, aunque han gastado millones de pesos en el Merca Santo
Domingo, el cual fracasó lamentablemente en sus intentos por falta de visión y
gerencia y apoyo lo han tenido, convirtiéndose en un elefante blanco, situación
que no ha permitido tomar la decisión de cerrar el mercado de la Juan Pablo Duarte,
sobre todo porque no hay alternativas.
Más problemas:
El verdadero peligro lo constituye la
venta de carne de pollos en las calles, esos tablajeros inconscientes, pican
los pollos a la intemperie, azotados por las moscas, los gatos y perros
realengos.
Siendo esta la mayor alternativa de
los consumidores para adquirir la proteína necesaria para la alimentación.
Tilda de un crimen que esto suceda
delante de los ojos de todos e incluso los productores de pollos y los
ayuntamientos deberían dotar de stand seguros e inocuos a los tablajeros para
el expendio de la carne de pollo como lo ha propuesto CONADECO.
Pescado:
El pescado que se vende al aire libre
es otro peligro latente, producto se ofrece a plena calle, sin refrigerar, el que
ya ha sido congelado y al descongelarse se descompone con rapidez, lleno de
moscas, lo que por consecuencia lógica no ofrece ninguna garantía de ser apto
para ser consumido con seguridad.
Las fondas:
La venta de comida en las calles, es
ya una actividad tan normal que miles de personas viven de esa práctica.
Y los consumidores desesperados la
aceptan porque no tienen opciones, sin regulaciones, manipulados por personas
que no poseen el más mínimo concepto de lo que es el manejo adecuado de los
alimentos.
Eso se da por necesidad es que muchas
personas han proliferado en cada cuadra, en toda calle.
Sostiene Bisono que existen las
frituras, “que solo Dios” sabe como la manejan, vendiendo todo tipo de
alimentos contaminados, fritos con aceite oxidado por el rehúso.
Señala lo sucedido con el decomiso de
depósitos que almacenaban los famosos pollos ahogados, podridos, llenos de
gusanos en Santiago y nadie cayó preso.
Aunque fueron desmantelados en
Santiago y Moca todavía no hay consecuencias judiciales contra los violadores
de la ley.
CONADECO denunció a Salud Pública y a
la opinión que esa práctica era común en los “pica pollo” chinos descompuestos
en las granjas que los metían en tanques de cloro y nitritos por varias horas
para luego sacarlos nuevecitos y fresquecitos para ser vendidos en los
establecimientos chinos y las frituras.
Aduce que el porvenir de los
consumidores es “incierto” y las autoridades competentes no aplican medidas
contra los autores.
Globalización:
Sin embargo, las mercancías que uno haya
en los supermercados del país no tienen el control sanitario apropiado y se
venden productos lácteos sin la inocuidad debida para el consumo humano.
Mientras las autoridades que tienen
que hacer cumplir la ley, permiten el comercio de productos inapropiados para
el consumo, incluyendo fechas vencidas, sin etiquetar y sin Registro sanitario.
Subdesarrollo:
Irresponsabilidad de las autoridades
competentes cuya función es hacer cumplir con las leyes que garanticen una
actividad comercial segura y confiable.
Comentarios
Publicar un comentario