Decenas de militares bolivianos se suman a las protestas civiles.

Bolivia. Desde el que el 11 de noviembre del año 2019, que un grupo de golpistas sacaron a la fuerza al presidente de Bolivia, Evo Morales, los nuevos gobernantes han convertido en un a ese país centroamericano en una especie de “arroz con mango”. 

Morales quien gobernó Bolivia casi 14 años, un récord nacional de permanencia en el poder, debido a las presiones estuvo que coger la sábana por “un canto” y macharse a México donde el presidente Andrés López Obrador lo recibió como un héroe.

Desde ahí, Morales que sacó a Bolivia del marasmo tras las acciones de los “traidores bolivianos” se vio forzado pedir asilo en Argentina.

Su renuncia al cargo que ostentaba cuando aspiraba a la repostulación, un grupo nefasto  lo obligó a salir huyendo para evitar ser asesinado, porque perdió respaldo de las Fuerzas Armadas y la Policía.

Desde que la traidora de la autoproclamada sustituta, Jeanine Áñez, Bolivia está viviendo en un infierno sepulcral. 

Este martes, decenas de militares decidieron pedir la renuncia para no seguir bañando las calles de Bolivia con la sangre de sus hermanos, padres, madres y vecinos.

Uniformados y juntos a miles de civiles, salieron a las calles a emitir consignas Fuerzas Armadas, únanse a la lucha", coreaban incesantemente, mientras los soldados respondían: "Que viva Bolivia, que viva la Wiphala".

Cada día son más los bolivianos que se suman a las protestas en contra del gobierno ilegítimo de la ultraderecha, Jeanine Áñez Chávez.

La critican porque ha sembrado el terror, la violencia y la represión en el país indígena.