Omar Fernández es el gran triunfador elecciones 2024 en República Dominicana.
En un sistema y gobierno vulnerable, el muchachito venció el poder, también, al presidente Luis Abinader que está tan dolido, aunque modifique la Constitución no se atrevería volver a aspirar.
Por: Marcelo Peralta: "No tengo preferencia política partidista con nadie ni antes y menos después de las elecciones".
Santiago, R.D.-El fenómeno político Omar Fernández, su victoria a senador en el Distrito Nacional postulado por el PLD, Fuerza del Pueblo y aliados, concitó mayor impacto social que el obtenido en Santiago por de Daniel Rivera del oficialismo.
Incluso, el novato como lo denominaron, se llevó de “cuajo” a Guillermo Moreno su contrincante y candidato oficialista.
En contra de Omar Fernández, estaban batallando partidos adversarios, empresarios, sectores religiosos y hasta a su padre Leonel Fernández, el tres veces presidente de la República.
El demoledor triunfo de Omar Fernández, ha sido tan contundente, que al decir de ciudadanos de Santiago, con esa aplastante victoria del "muchachito", se llevó mayores lauros que los logrados por la misma reelección de Luis Abinader.
En el país solo se habla del triunfo de Omar Fernández; con ello, opaca la victoria del oficialismo y su avasallante poder.
De plano, al fin y al cabo, esa victoria del PRM y Luis Abinader, se prevé los afectará esos próximo cuatro años de gestión, que ha dicho no volverá aspirar aunque cambien la Carta Magna.
La repostulación de Luis Abinader; su Partido Revolucionario Moderno-PRM-, concitó tan impacto en la sociedad, porque, desde hace dos años, con el poder que posee sus aspiraciones se estuvo batiendo como el cobre en caldera sometida a 4 mil grados.
Además, otro efecto que quitó brillantez a la repostulación del mandatario en el PRM fue el “avasallamiento” y “mudanza” de dirigentes de otras agrupaciones hace dos años antes de esos comicios de febrero para alcaldes, alcaldesas, vicealcaldesas, directores, concejales.
Más, el 19 de mayo 2024, para presidente, senadores y diputadores, lo que generó desánimo, poco interés en miles de votantes al negarse ir a las urnas, cuya abstención, en ambas oportunidades, se percibe fue muy elevada.
La timidez de la oposición fue tal, en el PLD y FP la misión de militantes no era luchar contra la reelección del presidente Luis Abinader, sino, ir a las urnas a votar y luego medir quien obtenía más para acudir a una eventual segunda vuelta electoral.
Hubo sufragantes que se quedaron con el “moño de un solo lado”, porque ni votaron en primera vuelta; pero, tampoco, se le dio el plan de hacerlo otra vez este mismo año 2024, ya que la Junta Central Electoral declaró la victoria de Luis Abinader en el primer boletín que emitió.
Oficialista estaban seguros ganarían en la primera, jamás el PRM solo, sino, anticipado, congregaron partidos emergentes con la finalidad de asegurar el triunfo.
El PRM no ganaba solo la primera vuelta y se cobijó en el aleo de partidos, cuyos dirigentes están acostumbrados a disfrutar las mieles del poder; formalizaron alianzas temprano; “amarraron la chiva” con sobrado tiempo ante la lentitud de opositores que se quedaron “sin pito ni flautas”.
Comentarios
Publicar un comentario