En Sabaneta no hay terreno ni para los muertos

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Por Marcelo Peralta

San Ignacio de Sabaneta, Santiago Rodríguez, R.D.- En este municipio noroestano ya no hay donde sepultar a los muertos.

La carencia de espacio está creando inconvenientes a familiares llevar hasta su última morada a sus fieles difuntos.

La semana pasada, familiares de Salvador Díaz, nacido en Dajabón y al radicarse en Estados Unidos fue pensionado por antigüedad en servicio y se estableció en Sabaneta.

Fue hallado moribundo en medio de la casa, al sufrir un golpe en la cabeza y desmayarse.

Tiempo más tarde amigos y vecinos lo rescataron, pero al llevarlo al hospital murió.

Realizados los trámites de rigor en el centro de salud, trasladado a la funeraria y finalmente a sepultarlo cuando se dio la desalentadora noticia de que no había espacio para enterrarlo.

Para sepultarlo fue necesario llamar desde Santiago y pedirle a un ciudadano dueño de un nicho cederlo para depositar los despojos mortales de Díaz.

Este buen samaritano debió interrumpir en la misa que escuchaba el domingo en el templo San Ignacio de Loyola para acceder a la petición de los familiares del fenecido.