Restaurar la moral y soberanía en RD

Luis Abinader, Presidente de la República Dominicana.

Por UBI RIVAS

ubirivas30@gmail.com.-

Abrumado y aturdido por el desorden y corrupción, legado de los dos desgobiernos del expresidente Danilo Medina, sumado a la cota alta de la covid-19 que mata diario más de diez dominicanos, sin otear aplanar la curva de la pandemia porque la ciudadanía no respeta el distanciamiento, clave para evitar contagio, nuestro presidente Luis Abinader enfrenta otros serios retos identificados en restaurar la soberanía nacional en ascuas, y la moral nacional en el estercolero.

En su breve alocución virtual en las Naciones Unidas conmemorando el 75 aniversario de su nacimiento este 23 septiembre, nuestro gobernante aludió prioridades de su naciente administración salud, educación y tecnología, que en un discurso breve, es razonable omitiera aspectos nodales como retos, reforzar protección violencia género y niñez, criminalidad, y de manera especial, restaurar la soberanía nacional que el PLD socavó permitiendo ingresar dos millones de haitianos, y restaurar la moral diluida por la corrupción más escandalosa de nuestra historia.

Pandemia covid-19

Concerniente a la pandemia covid-19, el país requiere una política contentiva drástica, imponiendo con vigor el distanciamiento, insistiendo por los medios de comunicación la rigurosidad del distanciamiento, única alternativa eficaz hasta el ingreso de la vacuna, que grandes mayorías irrespetan, en su propio perjuicio, prueba más de diez muertos diarios y centenares de contagiados.

La vacuna fuese de Rusia, Reino Unido, China, EEUU, no llegará este año a los dominicanos, y cuando llegue, tendrá prioridad a los más vulnerables, diabéticos, cáncer y dolencias análogas.

Leyes reforzadas

Las leyes concernientes a proteger la violencia de género, niños y adolescentes, deben radicalizarse de manera que repercutan en mayor seguridad y normas de vida beneficiosas a esos sectores muy vapuleados y ligeramente socorridos hasta hoy, y la concientización mediante campaña razonada por los medios de comunicación, con matriz en la estación televisora del Estado, ahora conducida por el veterano periodista Nelson Marte, secundada por todos los canales, radioemisoras y diarios.

Criminalidad

La criminalidad que porfía el monopolio de la violencia, responsabilidad y deber del Estado, es evidente que amerita una estrategia nueva contundente, disponiendo nuestro gobernante programa diseñado por el exalcalde de Nueva York, Rudolph Guiliani, entendiendo que el nuevo director de Policía Nacional secundará las aspiraciones y propósitos del gobernante, diferente al anterior.

Cobertura SENASA

Nuestro gobernante demostró, antes de cumplir su primer mes, sus intenciones de cubrir a sus diez millones de paisanos con SENASA, disponiendo cobertura dos millones, y el resto de tres millones a diciembre venidero, encontrando cobertura de cinco millones, iniciada por el expresidente Leonel Fernández.

Educación virtual

La educación virtual es un reto del país y estos tiempos, que la pandemia ha obligado, convirtiendo un azote en una versión nueva de la educación, el conocimiento y las potencialidades de las aptitudes, en gran porciento aletargadas o dormidas.

Distribuir cientos de miles de organizadores a profesores y docentes representa un vuelo inédito en la educación, sin pretender ni exigir que todo será de una vez y total, sino un proceso gradual cuidadoso para fructificar exitoso, recordando que la prisa es plebeya y frustrante.

Servicio exterior

El servicio exterior requiere verlo con lupa, verificando quienes cobran aquí sin prestar servicios, suprimiendo excesivo personal diplomático y consular (47 cónsules en NY), incorporando figuras idóneas, conservando algunos actuales embajadores valiosos, designando embajadores concurrentes.

Restaurar soberanía

Restaurar la soberanía nacional socavada por el permisivismo condenable del PLD vinculado a negocios de empresarios, políticos, militares y policías que dicen custodiar la frontera y lo que consiguen es enriquecerse, es misión urgente del presidente Abinader, monitoreando por varias fuentes fidedignas, el idóneo desempeño de quienes han propiciado la invasión pacífica de dos millones de haitianos, devolverlos a su país por métodos rígidos, y solo por contratos presencia obreros industria construcción, recolección café, cacao, azúcar y mureos arrozales.

Nuestro gobernante debe tener muy presente el ejemplo de Kosovo como socava una nación, ejecutar política de restaurar disminuida soberanía, formalizando un TLC con Haití, eliminando la corrupción de los mercados binacionales que enriquecen más a militares y policías que a comerciantes de ambos países, gestionando con la Unión Europea, Canadá y EEUU invertir en zonas francas del lado frontera haitiana, contribuyendo riqueza haitiana y frenando invasión.

Deuda externa

Antes de cumplir el primer mes de su gobierno, el presidente Abinader gestionó préstamo Bonos Soberanos por US$3,800 millones.

Conocemos las urgencias económicas que requiere su gobierno para superar la crisis pandemia y desbarajuste heredado del gobierno anterior, pero la deuda externa que heredó por US$44 mil millones, no debe seguir la conducta anterior, manejándose con prudencia y haciendo acopio de ahorros en instituciones eliminadas y su correspondiente nómina.

Restauración moral

Dentro de todos los retos a enfrentar, quizá el de mayor urgencia y trascendencia es el alusivo al estercolero de la degeneración moral heredada, que debe propiciar e instaurar, respaldando a los organismos idóneos en perseguir, clarificar y castigar la corrupción de mayores proporciones en 175 años de vida republicana, debiendo estar conteste de que, no proceder con firmeza, podría traducir envalentonamiento del PLD, y posible retorno a la grupa del poder, y entonces revertir en su contra cuanto debe contribuir a producir las condignas sanción moral al fardo vagabundesco heredado.