Reclaman que el hospital Padre Fantino lleve el nombre del doctor Juan Enrique Kunhartd Oleaga.

 Nació el día 24 de diciembre 1918 en San Francisco de Macorís y murió a los 88 años en Montecristi.

Por Marcelo Peralta     
                                    
San Fernando, Montecristi, R.D.- Se reactivaron las voces de ciudadanos de libres y pensamientos democráticos pidiendo al gobierno designe con el nombre de doctor Juan Enrique Kunhardt Oleaga el Hospital Provincial Padre Fantino.

Nació el 24 de diciembre de 1918 en San Francisco de Macorís, provincia Juan Pablo Duarte.

Era hijo de Eduardo Kunhardt de ascendencia alemana y de la dominicana Doña Balbina María Oleaga.

Su abuelo vino al país con su familia a trabajar en el ferrocarril que se construyó desde el Municipio Francisco del Rosario Sánchez hasta La Vega.

El profesional de la Medicina llegó a Montecristi en el año 1945, aunque su abuelo, padres y hermanos murieron y fueron sepultados en San Francisco de Macorís.

Sin embargo, el galeno al enamorarse de la ciudad de El Morro sembró raíces con una idolatrada hoja de servicio, legado bien ganado ayudando a los más necesitados y que decidió en vida que cuando murieran lo sepultaran cerca del cadáver de su esposa en la ciudad de San Fernando.

Exponen que los montecristeños que conocieron al galeno invocan su nombre para consagrar la proeza ganada por los aportes que hizo de manera libre, independiente, soberano, democrática, desinteresados, inspirados en los ejemplos, luchas, sacrificios, solidaridad, entrega.

Que entregó su vida a servir, a ayudar a los más necesitados y tratar de estimular a los que tenían recursos a trabajar de manera abnegada a favor de hombres, mujeres, menores, que requerían asistencia desinteresadas.

Realizó obras humanitarias regidos por los valores, hábitos y principios aprendidos, básicamente en su hogar materno y paterno basados en la dignidad humana, libertad, igualdad, justicia, solidaridad, convivencia, bienestar, cohesión social, a favor de miles de personas necesitadas.

Hacen saber que si el Estado quiere reconocer al profesional de la Medicina y filántropo, quien, a pesar de ser de descendencia alemana, que nació, se crio en el país, aportó en salvar vidas, respecto a los derechos humanos, paz, justicia, desarrollo político, social, económico, cultural, convivencia, el centro debe llevar su nombre sin dilaciones.

Recuerdan que no se cansarán de promover la designación de Juan Enrique Kunjhartd Oleaga con su nombre estampado en la entrada del edificio del Hospital en reemplazo de Padre Fantino en el Municipio San Fernando de la Provincia Montecristi.

El Estado puede cambiar el nombre que tiene por el del doctor Juan Enrique Kunjhartd Olegada, en honor a los aportes que hizo a la salud,  bienestar,  seguridad colectiva de sus habitantes, de otros pueblos a través de los servicios como médico, regidor y ciudadano ejemplar.
 
Estudios.

Realizó los estudios primarios y secundarios en la Provincia Juan Pablo Duarte y universitarios en Santo Domingo, graduándose de médico al comienzo de la década de los cuarenta.

Hizo la pasantía en Elías Piña y, al sufrir la rotura de un brazo, viajó a Estados Unidos, donde cursó algunos estudios más avanzados.

Llegó a Montecristi en el año 1945 a dirigir el hospital Padre Fantino, que estaba en el edificio de dos plantas ubicado en la calle Rodríguez Camargo, propiedad de doña Amada Solano.

Desde el inicio emprendió el ejercicio de su profesión y la dirección del hospital con especial dinamismo.

Adquirió fama por toda la Región Noroeste, Cibao Central a cuyo centro acudían pacientes en busca de atenciones médicas.

La fama se extendió por el mundo, porque uno de sus hijos fue de los principales científicos de
 Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio NASA de Estados Unidos, fabricando naves espaciales.

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