Santiago y el país lleno de haitianos irregulares sin que el gobierno diga esta boca es mía

Por: Marcelo Peralta

Santiago, R.D.- La debilidad del país en implementar políticas, herramientas de gestión fronteriza que detenga la desenfrenada migración haitiana, en un plazo de meses, la población haitiana será mayor que la dominicana.

Si desde las esferas estatales, quienes dirigen los destinos nacionales, aplican medidas preventivas, control en la migración irregular, desmantelar redes de crimen organizado, proteger la frontera, se estila en un plazo de meses la población será mayor que la dominicana.

 

La llegada irregular de haitianos se incrementó al retornar en gobiernos de Leonel Fernández 2004-2012; se desbordó en ocho años de Danilo Medina 2012-2020 con el infausto Plan Nacional de Regularización trayendo camiones y guaguas repletas de haitianos que nunca habían pisado tierras dominicanas para satisfacer apetencias de organismos internacionales.

 

En el actual gobierno del PRM y la gestión de Luis Abinader el flujo migratorio de haitianos está fuera de control, en que calles, avenidas, barrios, campos y provincias en  el Cibao solo se ve haitianos.

Al parecer la haitianización en República Dominicana no tiene parangón, convertida en la esencial del partido gobernante y de la actual gestión como único medio en hacer desaparecer la patria de Juan Pablo Duarte y prohombres que 180 años atrás usando machetes trozos de madera expulsaron a las huestes africanas.

 

Está trabajando en cocinas, supermercados, delivery, controlan paradas de motoconcho, laboran negocios, hay que son prestamistas, venden agua de coco, guarapo de caña, helados, empleados de clínicas, hospitales estatales, choferes de carros del transporte urbano.

 

Hay guachimanes, policías normales, guardias, trafican con mercancías irregulares, trata de personas, vende, drogas, armas de fuego, trabajan en construcciones estatales, también en la privada sin que el gobierno controles nada.

 

Al parecer nadie puede abordar la migración haitiana desde el punto de vista holístico y lo usan en provecho de su potencial político porque no afrontan las causas y expulsan de manera masiva a su país de origen.

 

Aquí, la migración nadie resolverá, porque se ha convertido en un poderoso agente impulsor, insostenible poder controlado por mafias compuestas por organismos internacionales, haitianos, dominicanos, políticos, militares, autoridades, empresarios vinculados a ramas agrícolas, pecuaria, ganadera, porcicultores, avicultores, entre otros.

 

Al parecer se ha agotado en el país las capacidades, fortalecimiento, fuerza de trabajo, inversión, voluntad, diversidad cultural, valor, coraje de autoridades que frene esa migración.

 

En los actuales momentos, la masiva y desbordante migración haitiana, a pesar representa un peligro al porvenir, implica retos, desafíos por el rápido crecimiento atenta contra la estabilidad del país y la generación que ha de llegar.

Casas, apartamentos en Santiago están, villas están repletas de haitianos lo que constituye un desafío dramático a la estabilidad nacional, en factores de  economía, política, sociedad, educación, cultura, medio ambientales.

 

El ingreso de haitianos a República Dominicana es acelerado, fenómeno social que está causando amplia variedad de razones que afecta áreas económicas,  educativas, laborales, familiares, desastres ambientales.

Además, la migración desordenada, irregular genera problemas inesperados, experimenta peligro, crece la proliferación del tráfico ilícito de migrantes, desnaturaliza lo auténtico, daña la estabilidad social, lesiona el acervo cultural, educativo, troncha oportunidades de muchas personas y contribuye al deterioro generalizado.