El alcalde de Cabo Rojo quiere cruceros en sus costas.

Por Cesiach López Maldonado y Marcelo Peralta. Fotos tomadas por Isabel Ferré Sadurní.

Cabo Rojo, P.R.- Este poblado es paisajes llenos de vida y color en Cabo Rojo, que su color obedece al agua que dan los residuos de la explotación de Bauxita.

Ocho barrios, su centro cívico, área que comprende la zona urbana principal de la ciudad, es la sede del gobierno municipal distante a 3 kilómetros de la línea costera del suroeste de la isla.

El ejecutivo municipal Jorge A. Morales Wiscovitch está centrado en lograr alianzas para potenciar el turismo en esa ciudad.

El Municipio está atendiendo, simultáneamente, la rehabilitación de diversos espacios públicos, a tono con la meta de lograr que más visitantes locales y del exterior, los tomen en cuenta.

Tiene planes de desarrollo turístico figuran las mejoras a varios lugares icónicos de Cabo Rojo, trabajar con su embellecimiento y ornato.

Un 60% de los ingresos municipales vienen del turismo, por lo que el alcalde, Jorge A. Morales Wiscovitch, dijo centrarse en nuevas estrategias, alianzas para continuar el crecimiento de ese sector y no depender de préstamos para mantener la economía del pueblo y dar paso al desarrollo de proyectos.

Destacó que busca convertir a su pueblo en un destino para la llegada de pequeños cruceros de lujo, como el Sea Dream II de la compañía Sea Dream Yatch Club, con capacidad para 110 pasajeros, que atracó en febrero en Cabo Rojo.

“Los años de vivir de préstamos pasaron a la historia y Cabo Rojo, al tener las bendiciones de la naturaleza, entendemos que podemos apostar al turismo como una de las principales fuentes de ingreso y que Cabo Rojo se pueda sustentar solo, sin tener que estar dependiendo de este tipo de cultura de tomar prestado y estamos trabajando para eso”, expresó.

Fundado el día 17 de diciembre del año 1771 es una zona que va en crecimiento.

Antes era municipio Autónomo de Cabo Rojo.

Limita al sur con el Mar Caribe, al oeste con Canal de la Mona, al norte con las ciudades de Mayaguez y Hormigueros, al este con Lajas, Hormigueros y San Germán, Puerto Rico.

Cabo Rojo está repartida en 5 distritos.

“A Cabo Rojo vino un crucero pequeño, de los que llaman ‘de lujo’ y de las visitas que hicieron a Puerto Rico, hablando con el capitán y viendo correos electrónicos, de los destinos más importantes para este crucero fue Boquerón y tal así fue que ahora Boquerón va a ser una parte fija en sus visitas a Puerto Rico”, contó el alcalde.

Según Morales, esta experiencia abre las puertas para que más embarcaciones de este tipo anclen en las costas caborrojeñas y se pueda capitalizar en este mercado.

“Estamos trabajando con eso. Lógicamente, hay que mejorar las facilidades, muelles. Por lo menos para este crucero, el Coast Guard nos pidió unos detallitos y se está trabajando con eso. Pero, gracias a Dios, eso nos trae un poquito más de economía y, a la misma vez, el que vengan a Boquerón van a hablar bien y van a volver o van a llegar más personas por otras vías aéreas y terrestres”, auguró el alcalde.

Morales adelantó están en gestiones para promover a Cabo Rojo bajo el concepto de ‘sister city’ que son ciudades hermanas, junto con Key West en Florida.

Con este esfuerzo, ambos destinos se promocionarán entre sí.

“Hubo un acercamiento de personas de Key West en los Estados Unidos para hacer un concepto que lo tienen otros países de hacer las ciudades hermanas. Ya ellos hicieron su resolución allá en el gobierno, nosotros la hicimos aquí. El concepto es que Key West va a promocionar a Boquerón, Cabo Rojo, Combate y nosotros a Key West como ciudad hermana y se van a realizar actividades entre ambos pueblos”, sostuvo el alcalde.

Somos Cabo Rojo.

Remozarán emblemáticos espacios.

“Le hemos dado énfasis a poner bonito nuestro pueblo, ya que Cabo Rojo es una ciudad turística que recibe miles de visitantes y ese fue uno de nuestros grandes retos.

Las edificaciones municipales estaban en un estado de abandono bastante crítico y el ornato del pueblo le faltaba brillar”, manifestó Morales.

Otro de los proyectos importantes para el alcalde es la segunda remodelación del poblado de Boquerón, que está en proceso de diseño y tendrá un costo aproximado de $1 millón.

“Se había arreglado el poblado y ese diseño que se trabajó no fue funcional, ya que fueron tablas ornamentales encima de bloques y se han roto, se le salen los tornillos, se levantan y ha resultado en un peligro. Los carritos que se compraron para los comerciantes se han convertido en un peligro también porque están llenos de moho por todos lados. Así que viene un proyecto de remodelación del poblado de Boquerón. Todos estos trabajos son con fondos City Revitalization, ARPA y dinero del CRIM”, sostuvo el alcalde.

El mandatario municipal dijo también estar gestionando permisos para dar inicio a la remodelación del Faro Los Morrillos.

“Se va a restaurar el Faro Los Morrillos. No se había podido hacer antes porque el permiso que teníamos para utilizarlo llevaba varios años vencido y hubo que entrar nuevamente en proceso de competencia para poder administrarlo. Gracias a Dios nos favorecieron y ya recibimos el permiso oficial y, próximamente, se harán unos permisos de remodelación del faro y comenzará nuevamente el uso”, explicó el alcalde.

Los trabajos incluirán el reemplazo de puertas y ventanas, reparaciones de grietas y de las tablas de la plataforma del segundo piso y la pintura de sus exteriores.

Del mismo modo, el alcalde caborrojeño proyecta realizar mejoras a la plaza de recreo Ramón Emeterio Betances, y a las calles del casco urbano.

Ambos proyectos, indicó, que ya están en proceso de diseño y la inversión es de cerca de 2 millones de dólares.

Por otra parte, el alcalde dijo que trabaja en un proyecto de mitigación de inundaciones en la comunidad Pole Ojea y el barrio Corozo. 

Allí se construye un canal pluvial a un costo aproximado de 3 millones dólares.

“Se está construyendo un canal pluvial para desvío de aguas y evitar las inundaciones en la comunidad Pole Ojea y barrio Corozo. Esa comunidad es como un hoyo y, aunque allá no llueve mucho, pero cuando hubo las lluvias estas de los 100 años, en esa ocasión se acumularon aguas y hubo que extraerlas y había residencias con ocho pies de agua, llegándoles a las ventanas. 

Esa construcción es para evitar que esas aguas lleguen allá y que eso no vuelva a suceder”, indicó Morales.

Comentarios