Líderes iberoamericanos aprobaron enfrentar desafíos forestales.
Hacer frente a los desafíos globales del cambio climático, a la pérdida de la biodiversidad, contaminación, deforestación, desertificación, pérdida de glaciares, sequía, degradación de los suelos, escasez de recursos hídricos, contaminación de los océanos y aumento de riesgo de desastres.
La violación a derechos
digitales, daños al medio ambiente, seguridad alimentaria, migraciones,
dictaduras y bloqueo a Cuba, constituyeron los principales puntos de la
declaración final de la XXVIII Cumbre Iberoamericana.
Además, condenaron el conflicto
bélico, por las distintas crisis, imposición de medidas coercitivas
contrarias al derecho internacional contra naciones iberoamericanas, enfrentar
el impacto sobre los sistemas agroalimentarios, inequidad social, económica, crisis
climática, dificultad en el desarrollo de una seguridad alimentaria
sostenible.
Aprobaron un plan regional
que marca una ruta para una seguridad alimentaria inclusiva, sostenible, en un
contexto donde el hambre, incertidumbre para conseguir alimentos se ha
acentuado y afecta a más de 250 millones de latinoamericanos.
Protección de entornos
digitales, derechos consagrados en marcos jurídicos; fomente el acceso
universal, equitativo y asequible a las Tecnologías de la Información, Comunicación TIC;
y que bajo ningún concepto se discrimine a las personas que no puedan o no
quieran integrarse al proceso de transformación digital”.
Líderes
iberoamericanos aprobaron la carta ambiental de principios,
derechos en entornos digitales, plan a la seguridad alimentaria y una nueva
arquitectura financiera.
Este último punto fue el
documento que más dificultó el consenso de los líderes iberoamericanos, algo
que consiguieron tras el almuerzo sostenido en el Palacio Nacional después de
la primera parte de la plenaria.
En la clausura de la sesión
plenaria el presidente Luis Abinader, anunció que los jefes de Estado y de
Gobierno habían logrado alcanzar acuerdos en las cuatro materias que formaban
los ejes temáticos de la cumbre.
Líderes iberoamericanos
buscan anticiparse a una escenario de aceleración de la transición digital con
un marco normativo al mundo cambiante implicando legislaciones específicas para
proteger las libertades y derechos de los ciudadanos.
El Fondo del Marco Mundial de
la Biodiversidad, avanzar en la definición del nuevo mecanismo multilateral de
participación en los beneficios de la utilización de los recursos genéticos e
información de secuencias digitales sobre los recursos genéticos y garantizar
un rápido financiamiento para su implementación adecuada.
Firmaron la Carta
Iberoamericana de Principios y Derechos en los Entornos Digitales como
guía para los procesos de actualización de las normativas nacionales sobre
los Principios y Derechos en los Entornos Digitales, para que la construcción
de la Sociedad de la Información esté centrada en las personas y en su desarrollo.
Se comprometieron a cerrar la
brecha digital, “impulsar el acceso a la conectividad asequible y de calidad;
fomentar entornos digitales seguros, confiables y que garanticen la
privacidad de las personas; que la transformación digital sea un instrumento
que amplíe el acceso a la educación, la salud y la cultura.
Asegurar entornos digitales
respeten la integridad, intimidad, privacidad de niños, niñas y
adolescentes; consolidar la libertad de expresión, promover el derecho a recibir
libremente información veraz, desarrollar acciones de combatir desinformación,
promover la libre elección de servicios y contenidos digitales”.
Desarrollo por medio de la
movilización de recursos financieros nuevos, adicionales, predecibles el acceso
a los adelantos tecnológicos y la transferencia de tecnologías.
Afianzar compromiso de
avanzar hacia estrategias que permitan una verdadera transformación de la
educación, incluyendo el desarrollo de competencias digitales”, asegura
la declaración.
Los mandatarios trazaron
una Ruta Crítica para Alcanzar una Seguridad Alimentaria Incluyente y
Sostenible en Iberoamérica.
Exigen a los Estados
desarrollados, Organismos Internacionales, Multilaterales que propicien el
aumento de capacidades, recursos para monitorear, gestionar la demanda de
fertilizantes empleados en la producción de alimentos, en países
en desarrollo, intensificar esfuerzos para proporcionar mayor adaptación y
resiliencia climática a todas las poblaciones vulnerables.
El documento convoca a
fortalecer el comercio entre los países iberoamericanos, de forma abierta,
no discriminatorio, transparente y basados en normas libre y transparente de
acuerdo con las reglas acordadas en la OMC y el desarrollo de las cadenas
de suministro agroalimentarias incluyentes y resilientes.
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