Dos policías presos de tres mataron a golpes al joven Richard Rafael Báez en el cuartel de Cienfuegos.
Por
Marcelo Peralta
Santiago,
R.D.- Dos oficiales de policías quedaron presos con medidas de coerción de tres
cada uno y un tercero con garantía económico acusados de asesinaron a golpes y
despojaron de 30 mil pesos al joven Richard Rafael Báez en el sector
Cienfuegos, Santiago Oeste.
Los
acusados y con tres meses presos son el capitán Manolo Aquino, encargado de la Dirección
Central de Investigaciones Criminales, adscrito a la división de la Inspectoría
ubicada en el Distrito Municipal Santiago Oeste; al igual que el segundo
teniente Vladimir Joel Jerez Suárez, quien pertenece
a ese mismo organismo.
Mientras,
el sistema judicial impuso garantía económica consistente en 500 mil pesos al primer
teniente Manuel de Jesús de la Cruz encargado de la Inspectoría policial en
Santiago Oeste.
Las
decisiones la adoptaron jueces de la Oficina Judicial de Servicios de Atención
Permanente en Santiago de los Caballeros.
Según
familiares de la víctima que resultó ser Richard Rafael
Báez, los oficiales Manolo Aquino y Jerez Suárez lo arrestaron y le robaron
la suma de 35 mil pesos, producto de una transacción comercial que había realizado.
Arrestado frente a su casa en Cienfuegos, relatan parientes comenzaron a golpearlo. Lo llevaron al cuartel en Santiago Oeste y lo “maduraron a golpes”.
Decidieron
llevarlo al hospital José María Cabral y Báez a curarlo y lo sacaron de ese
lugar para trasladarlo a la carcelita en el Palacio de Justicia de las avenidas
27 de febrero y Circunvalación Sur.
Allí
volvieron a golpearlo, lo sacaron de ahí para trasladarlo al hospital del
antiguo Instituto Dominicano de Seguros Sociales que está frente al Palacio de
Justicia.
Volvieron
a sacarlo del entro y lo llevaron de nuevo a la Carcelita del Palacio de
Justicia para volver a golpearlo.
Madurado
a golpes, decidieron volver a llevarlo al Hospital José María Cabral y Báez
donde murió a causa de los golpes, determinó una autopsia del Instituto de
Ciencias Forenses que suministró al sistema judicial en Santiago.
Es
por eso que la jueza Yiberty Polanco, impuso tres meses de prisión preventiva al
capitán Manolo Aquino, quien fungía como encargado
de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim) en Cienfuegos.
Igual
condena de tres meses al segundo teniente Vladimir Joel
Jerez Suárez, compañero de trabajo y cómplice de propinarle la muerte a
Richard Rafael Báez.
Mientras
al primer teniente Manuel de Jesús de la Cruz,
encargado de la Inspectoría policial en Santiago Oeste, se le impuso el
pago de una garantía económica de 500 mil pesos, impedimento de salida del país
y acudir cada mes al Palacio de Justicia a firmar el registro.
Dice
el informe del sistema judicial que los uniformados están acusados de matar a golpes
a Richard Rafael Báez, mientras estaba bajo su custodia en calidad de detenido.
Durante
la audiencia, los fiscales Patricio Rodríguez y Melania Bautista, expusieron
que el Ministerio Público posee suficientes elementos para probar la
responsabilidad penal de los agentes imputados quienes formaron la asociación
de malhechores, cometieron homicidio y robaron dinero a la víctima.
En la
solicitud de la medida de coerción, el órgano acusador, indica, los agentes
policiales formaban parte de una patrulla motorizada que efectuaba un operativo
preventivo del sector El Semillero en Santiago Oeste y arrestaron a Richard Rafael
Báez sin haber cometido ningún delito, solo porque se enteraron tenía 30 mil
pesos en sus bolsillos.
Báez fue
la única persona detenida en ese alegado operativo y en presencia de sus
familiares debía llevaba la suma de 30 mil pesos en efectos que luego en el
destacamento los agentes se lo quitaron y lo mataron a golpes.
Fue a
las 6:00 de la mañana del pasado 24 de marzo año 2022 que los policías
trasladaron a Báez por primera vez al Hospital José María Cabral y Báez y lo
retornaron al cuartel de Cienfuegos para proseguir dando golpes hasta que lo
mataron.
La
médica que lo evaluó verificó que Báez presentaba laceraciones en el área
temporal derecha y en ambos codos, por lo que refería dolor.
Por
esa razón, entregó al teniente Jerez Suárez una indicación para aplicar al
paciente una antitetánica, una crema, analgésicos, radiografía AP y lateral de
cráneo, indicación que el imputado ocultó.
Sin
embargo, los agentes ocultaron las indicaciones y los medicamentos, relata el
informe.
La
información precisa que los agentes violaron el protocolo de actuación,
haciendo un uso abusivo y desmedido de la fuerza.
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