Ingeniero agrónomo y excapitán de la Policía se mata al disparar a su esposa. Deja dos hijas en la orfandad.
Un ingeniero agrónomo y capitán retirado de la Policía, nativo de la comunidad El Cachón, provincia Barahona, al Sur del país, se suicidó de un disparo al tratar de matar a su esposa y deja dos hijas en la orfandad.
La tragedia fue en su casa de Santo Domingo y se trata del capitán
retirado de la Policía, ingeniero agrónomo y padre de dos hijas, Robinson Pérez
Urbáez, de 46 años.
Se disparó de manera mortal, al pensar que le había quitado la vida a su
esposa doña Nora del Carmen Espinosa Feliz, de 46 años de edad y madre de dos
hijas menores de edad.
La doña no murió, está en un centro de salud luchando por sobrevivir; recibió
tres impactos de bala en uno de sus brazos; en el vientre; en una pierna y un
estado de salud es delicado de salud.
Además, dicen médicos, la dama presenta varias heridas de arma blanca.
Se desconoce qué pudo pasar entre la pareja, qué motivó al expolicía y
especialista en ciencias agrícolas a tratar de acabar con la de su esposa.
Las dos hijas procreadas entre víctima y victimario pasan al grupo de niñas,
niños, jóvenes y adolescente de huérfanos causados por muertes violentas.
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