Atrapan en Santiago a haitianos vendedores de ron que mata.

Por Marcelo Peralta.

Santiago, R.D.-Organismos de Seguridad, Inteligencia y Judicial de la República Dominicana desmantelaron en Santiago centros de envasados de ron haitiano del denominado Clerén que en  los últimos ha matado a decenas de personas.

En allanamientos practicados por las autoridades en los sectores Pueblo Nuevo ubicado al Norte del Municipio de Santiago y Mella II en el Distrito Municipal Santiago Oeste fueron detenidos.

Allí fueron restados los haitianos Sifue Florestar, de 50 años, Edison Juevé, de 43, René Dorelien, de 34 y Jean Francois, de 26 años, quienes fueron trasladados a la cárcel preventiva del Palacio de Justicia, Licenciado Federico C. Álvarez, ubicado en la cuadra fue forman las avenidas 27 de Febrero y Circunvalación Sur en la parte baja de la ciudad Santiago de los Caballeros.

La Oficina de la Subdirección de Informaciones y Prensa de la Dirección Regional Cibao Central de la Policía informó del apresamiento de los cuatro haitianos acusados de de fabricar y comercializan clerén.

Con estos arrestos, se aumenta el número de detenciones en los últimos días por bebidas alcohólicas no controladas y que han causado la muerte de más de 40 personas.

El primer registro realizado en el sector Pueblo Nuevo fue avalado por la orden judicial número 1738-2020.

En esta ocasión fue allanada la casa de dos niveles, ubicada en la calle Juan Isidro Pérez, donde los agentes policiales y autoridades judiciales atraparon al haitiano a los Edison Juevé, René Dorelien y Jean Francois, ocupándoles 5 garrafones llenos de clerén.

También, otros 62 galones plásticos vacíos que se presumen lo iban a llenar del producto adulterado ron Clerén para salir a venderlo por diferentes pueblos del país.

Mientras, que incautaron 40 paquetes de cigarrillos que comercializarían de manera ilegal, violentando el protocolo establecido para su venta.

Del mismo modo, las autoridades incautaron 15 paquetes de sopitas hechas en patio donde vivían los haitianos en Pueblo Nuevo.

En otro allanamiento, esta vez efectuado por la Policía en la habitación de una pensión en el sector Mella II, perteneciente al Distrito Municipal Santiago Oeste, allí le echaron el guante al haitiano Sifue Forestar quien tenía 3 galones llenos de ron Clerén falsificado.

La historia se repite

La venta de bebidas fabricadas de manera  rudimentaria en Haití es una práctica antigua que ha tenido conocimiento las autoridades dominicanas.

Años atrás, quienes mayormente traficaban el ron Clerén desde la frontera a territorio dominicano eran algunos “atrevidos guardias” que por sus facilidades de estar uniformados se los revisaban.

Con frecuencia los guardias que osaban trasladar el con Clerén en galones y luego lo distribuían en botellas de vidrios en pueblos de las provincias  Dajabón, Santiago Rodríguez, entre otros.

En ocasiones, vendían las botellas llenas de ron Clerén y después enviaban a otros guardias a las casas de los compradores para confiscaban alegando que eso era “contrabando”.

Ha de recordarse que en el mes de diciembre del año 2017, en el Municipio Pedro Santana, provincia Elías Piña en Frontera con Haití, unas 15 personas murieron  tras ingerir ron Clerén de procedencia haitiana que estaba adulterado.

Esta experiencia, que enlutó al pueblo dominicano, no ha detenido a los falsificadores de bebidas alcohólicas que continúan como “Juancito el Caminador” por las calles, carreteras, avenidas, pueblos y provincias como si nada sucedieran.

Ahora, las autoridades policiales y judiciales volvieron a hacer una “redada” cuando más de 40 personas murieron en la ciudad Santo Domingo al consumir ron Clerén en medio del toque de queda nacional decretado por el gobierno debido a la presencia del coronavirus.

Los movimientos de autoridades policiales y judiciales de apresar a los traficantes de ron Clerén es por el escándalo de la muerte de las 40 personas y otras internadas.

Esta malsana práctica alcanza ribetes que hasta hace poco, miembros del Buró Federal de Estados Unidos –FBI- que es una agencia gubernamental que tiene el papel de amparar la ley a través de la investigación de violaciones de la ley penal federal anunció que investigaría la posible distribución de bebidas adulteradas en hoteles, porque se sospechaba que era la posible causa de las recientes muertes de turistas, lo que generó grandes escándalos en el mundo contra República Dominicana y una “campaña sucia” para desacreditar la afluencia de extranjeros.

En Santo Domingo, el ron Clerén se dice que se vende como “agua en botellitas” y su precio oscila entre los 80 y 100 pesos, que por su bajo costo tiene gran demanda, pero no así las “pócimas” que los inescrupulosos adhieren.

Después que los “traidores de la Patria” llenaron por “dinero”  la República Dominicana de “pútrido” y “famélicos” haitianos de todas las edades y condiciones físicas, ha aumentado en el país venta de este ron Clorén como si fuera una bebida nacional que paga impuestos; se incrementó el tráfico, venta y consumo de drogas, los robos, atracos, asaltos, violaciones a menores y mutilaciones de brazos y piernas como ocurrió con una menor en Pedro Brand que un haitiano mutiló los brazos por negarse a tener relaciones sexuales.

En los mercados, barrios, negocios,  colmados, pulperías del país, es normal la venta de este alcohol que no paga impuestos y a quienes los consumen los mata, y a otros que salen con más provocan lesiones permanentes.

A pesar de todo, los dominicanos siguen consumiendo alegando que su precio es barato.

Procedencia.

Ese ron Clerén es introducido al país desde Puerto Príncipe, Capital de Haití, para comercializarlo en los mercados.

Datos indican que entre los años 2016 y 2018, inspectores de la Dirección General de Aduanas, decomisaron y destruyeron,  supuestamente la cantidad de 265 mil botellas de bebidas alcohólicas, de distintos tipos,  que llegaron de contrabando al país por diferentes puertos, por lo general en cargas camufladas, no declaradas.

No obstante, el ron Clerén los haitianos lo introducen al país de diferentes manera, en envases grandes, pequeños, en guaguas, porque alegan que son comerciantes que vienen a comprar y llevar a s territorio.