Calvariode una joven en Oregón, Estados Unidos que murió de hambre y torturas causadas por su madre.

HISTORIA CONMOVEDORA:

A Jeanette Maples joven murió de hambre y torturas causada por su propia madre de nombre Ángela.

Jeanette Maples, era una joven de 16 años, sometidas a pasar hambre, torturas y sacrificios cometidos por su propia madre, aunque en las calles parecía una chica normal de un pueblo del medio oeste de Estados Unidos.

 

Vivía en Eugene, Oregon, una localidad de menos de 200 mil habitantes, ubicado en un valle fértil rodeado de montañas.

 

A pesar de las denuncias que hacía a vecinos y autoridades de servicios sociales en la ciudad de Oregón, Estados Unidos, jamás le hicieron caso.

 

Nadie en el vecindario se imaginaba el calvario que vivía cada vez que se cerraba la puerta de su casa, cuando su madre regresada de las calles.

 

Cuando médicos realizaron autopsias al cadáver de la menor, hallaron 200 lesiones, que especialistas descubrieron que la víctima tenía un agujero en la parte posterior de la cabeza que le había causado una hemorragia en el cerebro.

 

Padecía neumonía crónica, pulmones estaban al borde del colapso, a pesar que lanzaba gritos de socorro que nadie escuchó y su madre no la dejaba ni siquiera tomar agua de la canilla.

 

El castigo era tan inhumano, que la chica para mitigar la sed, debía tomar agua de la que había en el inodoro llena de excrementos humanos.

 

Ese día que la hallaron en el interior de la casa, descubrieron la joven estaba herida, inconsciente, tirada en la bañera y su mamá Ángela decía que la chica estaba dormida, sin embargo, ya había dejado de respirar, porque las torturas las había vencido.

 

La madre de esa jovencita torturas hasta la saciedad nunca ha podido explicar cómo la chica pudo llegar hasta el baño de la casa.

 

Trasladada de urgencia al Centro Médico del Sagrado Corazón en RiverBend, Springfield, una ciudad vecina de Oregón, pero al llegar ya estaba muerta.

 

Médicos intentaron reanimarla, había sido víctima de abuso prolongado, hambre, desnutrición aguda, daños irreversibles en riñones, 200 lesiones en su cuerpo.

 

El doctor Daniel Davis y patólogo que realizó la autopsia, dijo que le hicieron daño de distintas maneras que no pudo determinar qué herida la había matado.

 

“No había grasa en su cuerpo y muy poco tejido muscular”, declaró ante el juez y el jurado que se mantuvo todo su testimonio en silencio.

 

Para Davis el hambre que sufrió la chica ya era una condena a una muerte segura; con heridas en el cuerpo, torturas en diversas etapas que nunca tuvieron curación.

Ahora que se destapó el horror, surgen las revelaciones de crueles maltratos más horrorosos que puede sufrir un ser humano, al producirse su muerte, autoridades quieren castigar a la madre verduga.

 

El caso estalló a la hora de la cena en que la policía y paramédicos llegaron a la casa de Ángela, ubicada en la Howard Avenue marcada con en el número 150 donde la joven sufrió barbarie. 

 

Tras la muerte de Jeanette todo salió a la luz una sombría historia de abuso y tortura en el hogar.

 

Mientras se registraba la casa de la familia, los investigadores hallaron una regla rota, dos cinturones y ramas de árboles cubiertos de sangre. 

 

En una habitación salpicada de restos humanos y los investigadores creen que allí ocurrían abusos y torturas.

 

Detectives hallaron un trozo de cartón cubierto de sangre que era donde dormía la jovencita en el suelo para que no ensuciara con sus heridas la alfombra.