Historia de un Personaje: Doña Nené- 32 años de enseñanza, ahora sirve a Cristo

Historia de un Personaje: Doña Nene 32 años de enseñanza, ahora sirve a Cristo

 Por: Juan Pablo Bourdierd.

 

Sabaneta, Santiago Rodríguez, RD. En el histórico municipio de Sabaneta, en Santiago Rodríguez, República Dominicana, Doña Nené, cuyo nombre completo es Juana Antonia Milagros Rodríguez Hernández, es un personaje que vale la pena conocer. Con 32 años de servicio en la enseñanza, ahora dedica su tiempo a servir a Cristo.

Doña Nené estudió en la escuela primaria Julia Molina, que inicialmente estaba ubicada donde hoy está el colegio Parroquial. Más tarde, la escuela fue trasladada a otro lugar, que ahora es conocido como escuela Ana Joaquina Hidalgo y la José María Serra fue movida al lugar donde está hoy. Entre los profesores que recuerda de esa época están: Nereyda de Chan, Sorayda Lantigua y Nelsy Gómez.

 

Ella y un grupo de compañeros comenzaron a estudiar de forma autónoma, pero poco tiempo después, se inscribieron en el Liceo que había iniciado en el ayuntamiento municipal de Sabaneta. Con esfuerzo y dedicación, Doña Nené concluyó su bachillerato en 1965.

 Juan Pablo Bourdierd y Doña Nené

Juana Antonia Milagros Rodríguez Hernández-Doña Nené- relata cómo era la vida en aquella época, marcada por la dictadura. Recuerda que los estudiantes y maestros eran frecuentemente retenidos por la policía y la guardia, lo que creaba un ambiente de presión y tensión en el entorno educativo.

 

Decidió estudiar Educación, y pronto se encontró trabajando como maestra sustituta. Sin embargo, enfrentó dificultades; en una ocasión, a pesar de haber trabajado, no le pagaron por su labor.

 

A pesar de las dificultades, Doña Nené fue oficialmente nombrada maestra gracias a Fellito Tejada, quien era el director de la escuela José María Serra en ese momento.

 

Su primer trabajo como maestra fue en el liceo Librado Eugenio Belliard, donde enseñó cuarto grado en la tanda de la tarde. Entre los alumnos que recuerda están Dory Espinal y Víctor Cabrera.

 

Doña Nené también comparte una anécdota sobre su experiencia como maestra sustituta. Cuenta que una alumna llamada Rosa Toribio la desafió un día, le ofreció una galleta. Sin embargo, otros maestros intervinieron en su defensa. Hoy, Rosa vive en Estados Unidos, y cada vez que se encuentran, recuerdan esa historia entre risas.

 

Doña Nené cree que los educadores de hoy deben tener una buena formación y mucha paciencia, especialmente porque las dinámicas educativas han cambiado. Además, sugiere que deben estar actualizados en tecnología y mantener un contenido acorde a los nuevos tiempos.

 

Respecto a sus estudios superiores, Doña Nené estudió para ser Maestra Normal Primaria en Licey, Santiago, por tres meses. Durante ese tiempo, tuvo compañeros como Milagrito Jiménez y Doña Quisquella, quien era conocida por sus cuentos y chistes; le daban un chicle para que se callara, dice la educadora a carcajada.

También recuerda viajar con un grupo de compañeros de Santiago Rodríguez a la universidad Pedro Henríquez Ureña. Sin embargo, no pudo terminar sus estudios universitarios debido a compromisos familiares y problemas de salud.

 

En su vida actual, Doña Nené se dedica a su fe. Siempre ha sido religiosa, y encuentra consuelo y apoyo en la Iglesia. Participa activamente en grupos de la iglesia como Las Hijas de María y la Región de María, y asiste regularmente a la misa.

 

Destaca el papel crucial que juega la iglesia en la sociedad, especialmente en tiempos difíciles. Además, tiene una devoción especial por San Antonio y San Roque, a quien pide ayuda para sus enfermedades.

 

Doña Nené considera que la fe es fundamental y lamenta que se esté perdiendo entre las nuevas generaciones. Además, enfatiza la importancia de la educación para el progreso de un país.

 

Esta mujer ejemplar, con una vida dedicada a la enseñanza y ahora al servicio de Cristo, es sin duda un tesoro en su comunidad y un modelo a seguir.

 

De Juan Pablo Bourdierd y SabanetaSR

En el Día del Maestro, es un honor y un privilegio rendir homenaje a una educadora excepcional, Juana Antonia Milagros Rodríguez Hernández, cariñosamente conocida como Doña Nené.

 

Su dedicación y entrega en la enseñanza han tocado innumerables vidas, incluida la mía. Como maestra de 2do y 4to grado de Primaria, así como de inglés en 7mo de Secundaria, su sabiduría y paciencia fueron una luz guía en mi camino educativo.

 

Doña Nené, con su cálida sonrisa y su corazón generoso, personifica lo que significa ser un maestro. Su compromiso con la Educación y su habilidad para inspirar a sus estudiantes a alcanzar su máximo potencial son cualidades que hacen de ella una verdadera joya en el ámbito educativo. Su influencia va más allá del aula, pues ha sido una amiga y mentora que ha enriquecido nuestras vidas.

 

En este Día del Maestro, extendemos nuestra más profunda gratitud a Doña Nené por su inquebrantable dedicación y por el amor que ha brindado a cada uno de sus estudiantes. Que este día sirva como un recordatorio de la diferencia que un maestro extraordinario como ella puede hacer en el mundo. ¡Gracias, ¡Doña Nené, por ser una fuente de inspiración y por marcar nuestras vidas de manera tan significativa!