Peligra trayectoria del equipo Águilas Cibaeñas.

Por Marcelo Peralta

Santiago, R.D.-Peligra la trayectoria del tradicional y poderoso equipo de béisbol Águilas Cibaeñas, el cual en los últimos tiempos ha caído en aparentes desgracias que las podrían sacar de los escenarios del deporte rey de la República Dominicana.

Con una legión de seguidores en todo el país, este conjunto ganó su primera corona en el año 1952 hace más de medio siglo.

Repitió en el 1964 y alcanzó su mayor esplendor en las décadas de 1970 y 1990, cuando ganaron 5 campeonatos de manera casi consecutivas.

Sus mejores tiempos fueron cuando ganó en los años 1971-72; 1974-75; 1975-76; 1977-78; 1978-79; luego 1992-93; 1995-96; 1996-97; 1997-98; 1999-00.

Atraviesa por una serie de litis interna que van desde jugadores, accionistas, expulsiones, renuncias, cancelaciones y ahora afloraron al exterior, cuando la Corporación del Acueducto y Alcantarillados de Santiago -CORRASAN- la acusó de tener deudas multimillonarias con el servicio de agua potable. 

Sale a flote que sus cuentas bancarias han sido embargadas, en un caso relacionado con los herederos de acciones del señor Héctor  Marrero, fenecido. 

Sus acciones son 20 las que tiene dicha familia que es representada por el abogado José Rafael Ariza.

La sentencia viene de un Tribunal de Santo Domingo.

Junto al embargo a las cuentas bancarias del equipo, impide a otros directivos ejecutar un cambio de firmas en los bancos debido a que el presidente del equipo, doctor Adriano Valdez, está fuera del país..

Notificó a la Liga Dominicana de Béisbol que no debe intervenir en este caso, bajo el alegado que es intrínseco al equipo cibaeño.

También, que un dictamen de un tribunal contencioso de Santo Domingo ha impedido la celebración de la asamblea eleccionaria de las Águilas, que estaba convocada para el pasado 19 de julio.

A causa de esa situación, el equipo de Las Águilas Cibaeñas están en una especie de situación de limbo.

“Tampoco pueden celebrar asamblea hasta tanto no se decida este caso”, dijo Ariza.

Y se dice que su `residente, doctor Adriano Valdez está en Chile atendiendo asuntos de su profesión

Béisbol y su historia.

Aunque el béisbol se conocía en la República Dominicana desde finales del siglo XIX, la idea de crear un cuarto equipo surgió a partir de la década de 1930.

En principio el equipo fue bautizado con el nombre Santiago B.B.C., en la fecha lunes 2 de enero de 1933, como la primera novena representativa de esta ciudad y la región en los campeonatos nacionales, según el certificado de nacimiento mostrado por el consejo directivo.

En aquella reunión realizada el lunes 2 de enero de 1933, que deja constituido al famoso equipo de Santiago Baseball Club, participaron connotados munícipes de esta hidalga ciudad de la calidad de Domingo O. Bermúdez, Rafael F. Bonnelly, Augusto Vega Espaillat, doctor Manuel Grullón, Eladio Victoria Hijo, Ramón Suárez Vásquez y el licenciado Marcos A. Cabral encabezaron el grupo que le dio forma al representativo local.

También figuran como miembros fundadores de la escuadra santiaguera los señores Gustavo Tavarez, W.E. Brown Benjamín Sánchez G, Luis Meses Ariza, Rafael V. Meyreles, Esteban Piola, Luis Pérez y Demetrio Mojica.

Cinco días después de su formación, el sábado 7 de enero de 1933, sostuvieron su primer compromiso internacional jugando en el Play Enriquillo contra la famosa novena cubana “Cuban Star”.

Los visitantes ganaron el doble encuentro con pizarras de 9x4 y 4x1.

En el segundo partido el lanzador Cocaína García, con su compatriota Alejandro Oms en circulación conectó el primer cuadrangular en los terrenos del Enriquillo Park, según revela Juan Antonio Paulino (Pirí) en su libro Reseña del Baseball del Primer Santiago de América. 

Tres semanas más tarde, el 26 de enero, visitó a Santiago la novena Ponce de Puerto Rico que limita a una sola carrera al Santiago Baseball Club, anotada en la pierna de Luis Tomas Saillant, empujando por un triple del cácher Papín Henríquez. 

El conjunto santiagués consiguió su primera gran proeza el 16 de agosto de 1933, cuando blanquea dos veces al ya famoso equipo de Licey de la capital.

En el primer juego. los santiagueros contaron con la extraordinaria labor monticular del vegano Blanquito El Pino.

Mientras que en el segundo desafío de la jornada celebrada bajo el candente sol del Enriquillo Park el santiagués Bertico Pichardo con la ayuda en el noveno de El Pino dejaron de nuevo en blanco a Licey, para así propinarle 18 ceros consecutivos.

El nombre Águilas Cibaeñas: Como nota curiosa es importante señalar que el nombre Águilas Cibaeñas aparece publicada por primera vez el lunes 8 de abril de 1929 en la página deportiva del periódico LISTIN DIARIO, es decir cuatro años antes de la fundación del Santiago Baseball Club.

Aquella ocasión se leyó el siguiente titular: El Pitching de Bragaña, sin el “condimento” de la Perrubia, dejó en cinco “intentos” y sólo un “vuelo” a las Águilas Cibaeñas.

La crónica firmada por F. Elio Alcántara y Moby Dick se refería a la derrota de las Águilas del Sandino 10x1 a manos del Licey durante el campeonato nacional de 1929.

Los integrantes del Santiago Baseball Club jugaban una pelota romántica, ya que según el Maestro Pirí, ellos «vivían de sus salarios como obreros y solo cobraban una suma irrisoria por lo que denominaban dividendos (ingresos por taquilla) en cada juego, practicando el deporte por diversión y ejercicio y sin perder el entusiasmo».

Con el poderoso emblema del Águila, símbolo de majestad y de victoria a lo largo de la historia Santiago B.B.C., adopta oficialmente el nombre de “Águilas Cibaeñas” cuatro años después con la propuesta hecha por Luis Tomás Saillant, el 28 de enero de 1937, fecha de inicio de su exitosa trayectoria competitiva en la pelota profesional.

Durante la presidencia de Restituyo González, en 1953, se dieron los primeros pasos para convertir al equipo en una persona jurídica.

 En ese año, por decreto No. 9005 del 2 de mayo de 1953 se incorporó de acuerdo a lo que establece la Ley 520 de 1920. A partir de ese momento, el equipo es "Águilas Cibaeñas, Inc.".

Las realidades del béisbol profesional obligaron a las Águilas a modificar su constitución original. 

El decreto No. 1146 del 11 de junio de 1971 autorizó la conversión de asociación a Compañía. 

La constitución oficial fue aprobada en asamblea del 6 de octubre de 1971.