"Así no señor sistema".


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Zapete, periodista
Por Marcelo Peralta

Hay gente que nacen para hacer el mal.

El crimen cometido contra el periodista Marino Zapete de que la hermana del Procurador General de la República le mandó a cerrar su programa me "huele a dictadura a lo moderno".

Hoy fue a Marino Zapete y mañana, esos mismos o peores abusos se cometerían contra la mayoría de la sociedad.

"Hoy por tí y mañana `por mí" reza un adagio.

Eso es un abuso de poder. Un atropello a la "porquería democracia en que vivimos, pero es DEMOCRACIA."


Ningún funcionario por elevado que tenga los "moños" debería cometer abusos de esta categoría.

Si alguien se cree haber sido difamado, para esos, aunque muchos votan pus, pero es la vía legal para hacer valer sus derechos.

Abusos así solo se cometen en estercolero de país en donde se ha acabado la institucionalidad. 

El sistema actual, que por demás hay gentes que dicen en las calles que ha sido "secuestrado", pero que deben aparecer hombres y mujeres que respondan la sociedad aunque sea a "media", de qué está pasando con esos "engreídos funcionarios que se creen dueños del país".

Parece que con abusos de estas índoles lo único que nos queda es vivir como "las fieras en la selva".

De no ponerse "frenos" a estos abusos, las actitudes de mediocres funcionarios, el devenir no pinta nada bueno en la Patria de Juan Pablo Duarte, aunque "hipotecada" por traidores a organismo internacionales.

Si las gentes de mi país: República Dominicana despertara en el “porvenir otro gallo cantaría”.

Hay gentes que nacen para hacer el mal en perjuicio de la mayoría.

En mi país, de la “Tierra de Dios y que de los haitianos Juan Pablo Duarte, nos libró.

En los actuales momentos “los traidores” enquistados en los diversos sectores creen que el país es propiedad ellos.

Han traído de nuevo, a los haitianos que son nuestros enemigos y pagando placeres con el dinero que aportamos al Estado que debía ser dedicados a programas de desarrollo nacional.

Desde el esquema diseñado por los “traidores de la Patria”  a los dominicanos se les obliga a dejar sus sillas en las escuelas para dársela a los haitianos.

Igual en los hospitales a las mujeres parturientas dominicanas las tiran al suelo para colocar a las haitianas plagas de enfermedades contagiosas.

A los haitianos, el sistema ha establecido que en República Dominicana hay que regalarle "todo" y negar a los nativos el servicio que por ley corresponden.

Este putrefacto sistema político, económico y social en que vivimos al haitiano se les da más privilegios que los dominicanos.  
El dinero que pagan los contribuyentes al Estado para realizar obras de carácter social y de desarrollo nacional es “malgastado”.

Toda vez que se dilapida del dinero del pueblo, es haciendo más pobre a los ciudadanos.

No es mejor gobierno el que más ayuda preste a los ciudadanos, sino que lo único que hace en empobrecerlo y tener dominio porque los hará más dependiente, pobre, vago, esclavo de las miserias que reparte cada cuatro años en las elecciones.

Ni el gobierno y menos los saqueadores políticos no están para ayudar, sino para desarrollar planes y programas que permita al ciudadano ganarse la vida con el “sudor de sui frente”.

El gobierno, los políticos y los empresarios no están dizque para ayudar, sino a crear las condiciones para que cada uno de los dominicanos puedan trabajar y obtener los medios para mantenerse, ayuda a su familia a alimentarse, a estudiar y hacerse profesionales.

Desde el gobierno, que a sus integrantes los elige el pueblo lo que debe hacer es diseñar planes favorables y ponerlos al servicio de la sociedad, como son mejorar los sistemas de salud, vivienda, escuelas, hospitales, deportivos, culturales.

La misión de un gobierno no está en tener funcionarios corruptos que se dedican a golpear a periodistas honestos porque descubren que se están robando el dinero del pueblo, sino para cubrir los bienes del Estado.

Tampoco el rol del Estado está en tirar por la borda el dinero que pagan los contribuyentes favoreciendo a enemigos de la Patria de Juan Pablo Duarte, proteger a delincuentes y a mantener en cargos claves a gentes que golpea a la sociedad, entonces estamos marchando mal.

Los dominicanos debemos comprender que es tiempo ya de que rechace a quienes te regalan 500 pesos; una motocicleta, una funda de comida cruda llena de insectos es hacerte más infeliz y aumentar tus niveles de pobreza.

Si la juventud estudiara con el interés de progresar,  tendría el mismo derecho que esos “insípidos políticos” que hoy se pasean “horondos” exhibiendo fortunas con el dinero del pueblo.

Es bien sabido que los políticos “arman muñecos” con el de salud construyendo edificaciones defectuosas, pero ni ellos y menos sus hijas van a consultar porque el mismo no funciona para ellos; mandan a construir centros educativos, pero sus hijos estudian en los mejores colegios y universidades pagados y disfrutando de otros privilegios a costa de dinero del pueblo.

Hay ricos, políticos y funcionarios estatales que creen tener en la República Dominicana un país para ellos y otro para los menos pudientes.

Se está llegando el tiempo en que hay que decirle a los políticos que los ciudadanos comunes tenemos el derecho de hablar, decir la verdad de que el dinero que administran en las instituciones estatales no es de ellos, sino de todos.

El gobierno central debe actuar contra esos funcionarios que se roban el erario del pueblo y que los ciudadanos jamás debemos aplaudir a los que hacen mal uso del dinero del pueblo, porque no somos esclavos de un sistema que nos “falla en todos los momentos”.

Hay que hacerle saber al gobierno y a sus funcionarios que ellos son designados en los cargos para servir a la comunidad en sentido general, no para golpear, ni robar.

La ciudadanía tiene el ineludible deber de elegir a sus próximas autoridades.

La exhortamos rechazar a aquellos que ofrecen 300,  500 y 1000 mil pesos, porque te está haciendo más pobre, en esclavo, dependiente, mendigo, ya que el político no debe abusar de la ignorancia del pueblo.

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